Mijail Bulgakov: "Мастер и Маргарита" (El Maestro y Margarita) (1929-1940).
4º Ensayo.
Cap. 12: "Magia negra y revelación de sus trucos" (Черная магия и ее разоблачение). El gran teatro grotesco del mundo.
Francisco Huertas Hernández

Esa troupe satánica que desembarca en Moscú encabezada por Woland se presenta en sociedad en un espectáculo de magia negra en el Teatro Variedades, atestado de público curioso. El capítulo 12, "Magia negra y revelación de sus trucos" (Черная магия и ее разоблачение), uno de los centrales de la novela, condensa el humor grotesco y la sátira política con momentos sangrientos y mortificantes.
El crítico Wolfgang Kayser (1906-1960) publicó "Lo grotesco: su configuración en pintura y literatura" (Das Groteske: seine Gestaltung in Malerei und Dichtung) en 1957, y explica lo grotesco como algo extraño (incomprensible, ajeno a la lógica y la experiencia cotidiana, absurdo) que se apodera de nuestro mundo, introduciendo cambios inesperados y desatando terror. Lo grotesco aliena el mundo, poseído por fuerzas demoníacas (proyección quizás del Ello inconsciente en el mundo externo). La ambivalencia afectiva de lo grotesco incluye la angustia y la risa sádica y cínica.
Mijail Mijailovich Bajtín (1895-1975) rechazó esa interpretación trágica de Kayser y acentuó la vertiente alegre, carnavalesca y transgresora de lo grotesco en el humor popular.
Teniendo en cuenta que la literatura rusa ya había producido al menos tres maestros de lo grotesco (Gógol, Sujovó-Kobylin, Saltykov Shchedrín), "El Maestro y Margarita", es continuadora de esa tradición donde la sátira, estirada hasta la deformación que priva al ser humano de sus rasgos propios y lo cosifica, introduce lo demoníaco en lo cotidiano.
En Bulgakov coexisten lo grotesco fantástico terrorífico (Kayser) y lo grotesco carnavalesco satírico (Bajtín), y en este capítulo doce están perfectamente fundidos.
Traer el Gran Teatro del Mundo a un escenario, para, que, creyendo asistir a una función, el espectador contemple su propia miseria reflejada en los actuantes, ilusionistas que excitan la imaginación y las pasiones del público hasta llegar al paroxismo. Bulgakov hace desfilar a unos pobres equilibristas por la pista, pues, este teatro, en su dimensión de casa de lo grotesco, es, en realidad, un circo, antes del gran show de magia negra.
El mago aparece con un largo frac negro presentado por George Bengalski:
"Así pues, ciudadanos -empezó a decir Bengalski, mostrando en su rostro su sonrisa infantil-, ahora se presentará ante ustedes... -Aquí Bengalski, se interrumpió y pasó a hablar con una entonación diferente... ¡Y ahora aparecerá Monsieur Woland, el famoso artista extranjero, con su función de magia negra! Bueno, en realidad, tanto ustedes como yo sabemos -en ese instante, Bengalski sonrió con aire de sabio- que no existe tal cosa en el mundo y no es sino superstición, y que simplemente il maestro Woland tiene un gran dominio del arte de la prestidigitación, como veremos en la parte más interesante, es decir, cuando nos revele su técnica, y, puesto que todos nosotros aplaudimos tanto el arte como su revelación, ¡pedimos la presencia del señor Woland!.
Mientras declamaba todas estas sandeces, Bengalski juntó las manos, palma con palma, y se puso a agitarlas en señal de bienvenida..."
(Это был хорошо знакомый всей Москве конферансье Жорж Бенгальский.
(Это был хорошо знакомый всей Москве конферансье Жорж Бенгальский.
— Итак, граждане, — заговорил Бенгальский, улыбаясь младенческой улыбкой, — сейчас перед вами выступит... — тут Бенгальский прервал сам себя и заговорил с другими интонациями... Итак, выступает знаменитый иностранный артист мосье Воланд с сеансом черной магии! Ну, мы-то с вами понимаем, — тут Бенгальский улыбнулся мудрой улыбкой, — что ее вовсе не существует на свете и что она не что иное, как суеверие, а просто маэстро Воланд в высокой степени владеет техникой фокуса, что и будет видно из самой интересной части, то есть разоблачения этой техники, а так как мы все как один и за технику, и за ее разоблачение, то попросим господина Воланда!
Произнеся всю эту ахинею, Бенгальский сцепил обе руки ладонь к ладони и приветственно замахал ими в прорез занавеса, от чего тот, тихо шумя, и разошелся в стороны)
"La entrada en escena del mago con su ayudante larguirucho y su gato, que salió al escenario sobre sus patas traseras, hizo las delicias del público" (Выход мага с его длинным помощником и котом, вступившим на сцену на задних лапах, очень понравился публике)
Woland, Koroviev -alias Fagot- y el gato Behemot proceden de un mundo en el que no hay ni trucos ni técnicas sino poderes sobrehumanos. El truco es el engaño a los sentidos, y la técnica es la forma en que la naturaleza es manipulada por el humano. Lo contrario de estas técnicas y trucos son los milagros y los fenómenos paranormales. En una sociedad fuertemente empirista, que considera lo espiritual un invento de las clases dominantes para consolar a los explotados y perpetuar esa explotación, la religión, la magia, la superstición y todo lo inmaterial quedan proscritos. Pero los personajes se pasan toda la novela exclamando por todos los demonios y encomendándose a Dios. Cuando, tristemente, el comunismo se derrumbó en la URSS, Albania, Polonia o Yugoslavia, la religión -y la superstición- seguían allí, y renacieron con una fuerza inaudita. Bulgakov muestra en "Мастер и Маргарита" la pervivencia en el lenguaje, en las tradiciones -iconos- y en el inconsciente, de la religión y la necesidad humana de abrirse a lo trascendente, con veneración y horror, pues Dios y el Diablo son un solo ser, si no queremos admitir un poder que desafíe la omnipotencia divina, que refutaría la misma naturaleza de un Dios todopoderoso. El Yahveh castigador del Antiguo Testamento, vengativo, inmisericorde, no se aleja de la crueldad del Demonio. Dichas estas blasfemias, comprenderemos también que para el materialismo marxista, ideología oficial de la Rusia soviética, era equivalentemente blasfemo no descubrir la superchería de cualquier manifestación espiritual y mágica.
Woland empieza hablando de los cambios en Moscú, se refiere a tranvías y autos, ante la perplejidad de Bengalski, pero, en realidad, quiere saber si "¿habrán cambiado interiormente los moscovitas?" (сколько гораздо более важный вопрос: изменились ли эти горожане внутренне?)
Inmediatamente comenzaron los trucos con la advinación de naipes de la baraja, pero, enseguida, empezaron a llover chervontsi del techo. Estos fueron billetes de banco respaldados en oro que circularon para combatir la hiperinflación tras la Guerra Civil rusa hasta 1947, cuyo valor era 7,74 gramos de oro cada червонец (chervoniets). Los espectadores enloquecían de codicia, "arrastrándose por los pasillos, buscando a tientas debajo de las butacas" (Кое-кто уже ползал в проходе, шаря под креслами. Многие стояли на сиденьях, ловя вертлявые, капризные бумажки) y con el desconcierto de los policías.
Bengalski, portavoz de ese empirismo materialista oficial, denomina "hipnosis colectiva" (массового гипноза) a lo que acaban de ver, y añade que los experimentos científicos prueban que no existen ni los milagros ni la magia, y pide al Maestro Woland, la revelación de sus trucos. Esto provoca la ira del ayudante Fagot, y una voz del público exige que le arranquen la cabeza... y va el gato y se la arranca. Gritos de horror en los asientos, sangre, y la cabeza cortada que promete no decir más estupideces es reincorporada en su cuerpo sin ningún rasguño, devolviendo al presentador su integridad corporal. Bengalski es expulsado del teatro, y se vuelve loco.
El último número es más escandaloso aún. Una nueva ayudante, una chica pelirroja, con una enorme cicatriz en el cuello, reparte sombreros, zapatos, vestidos, estuches y bolsos de lujo salidos por arte de magia en enormes vitrinas, desatando la histeria de las mujeres del público, que se abalanzan sobre la pista para intercambiar gratuitamente sus vestidos y zapatos por los de marcas glamourosas de París. El pandemonium es total: las señoras arrasan con todo. En pocos minutos todo desaparece.
Un espectador llamado Arkadi Apolónovich Sempleiárov, presidente de la Comisión de Acústica de los Teatros de Moscú, pide que se revele la técnica de esos trucos tan aparatosos. Fagot dice que no hay que nada que revelar, que todo está claro, y ante la insistencia del importante funcionario, revela otro engaño: Arkadi Apolonóvich tiene una amante. La pariente actriz del funcionario le da con el paraguas, la gruesa esposa de Arkadi Apolonóvich grita que la detengan, y el gato decreta el final de la caótica función. Los magos se desvanecen en el aire.
Muchos ámbitos de la realidad y la fantasía convergen en este capítulo: un espacio claustrofóbico (teatro) dentro de una ciudad (Moscú) en un tiempo (década de 1930) en el que se representa un espectáculo inconexo de trucos de naipes, materializaciones de objetos que despiertan la codicia, brutal decapitación -¡reversible!- del presentador, y la negación total por parte de los magos de su supuesto engaño: no existen ni trucos ni técnicas que calmen la angustia de un público que vivirá con el terror de lo demoníaco que viola las leyes de la ciencia y de la lógica, pero, al mismo tiempo, se excitará con la riqueza derramada por los agentes del mal, y con la atracción de lo escabroso, la fascinación del mal.
Mijaíl Yevgráfovich Saltykov-Shchedrín (1826-1889) escribió que el objetivo principal de su obra era la protesta contra la avaricia, la hipocresía, el latrocinio, la perfidia y la estupidez de sus compatriotas. Y no eran únicamente defectos de un régimen como el zarista, o, posteriormente, el comunista, ni tampoco vicios nacionales del pueblo ruso, como los propagandistas rusófobos quieren hacer ver, sino una concepción antropológica pesimista del género humano, fruto de la convivencia social (interpretación de J. J. Rousseau) o de su naturaleza insatisfecha y vulnerable (interpretación de A. Schopenhauer). Bulgakov nos hizo viajar por el infierno en esta tierra, un averno de la cotidianidad abierta de par en par por el humor grotesco de la irrupción satánica.
Francisco Huertas Hernández
3 de octubre de 2025
Traducción usada: Marta Rebón
Gracias por el aporte
ResponderEliminarGracias a ti lector
EliminarUn viejo amigo me dijo una vez que muchos autores importantes comenzaban con B, Bajtin, Benjamin, Bulkakov....
ResponderEliminarY en música también: Bach, Beethoven, Brahms,... Brel, Beatles
EliminarHola Franciso. Te comento para pedirte que por favor retires una nota que has publicado sobre un proyecto que tuve hace mucho tiempo (Mispelisfav), publicado el 1 de noviembre de 2015. Por motivos profesionales no quisiera que la nota, mi nombre e imagen sigan publicadas. Gracias por el apoyo que me diste en su momento. Un saludo!
EliminarHe revisado esa publicación y la he suprimido, Daniel. Un saludo
Eliminar