lunes, 22 de diciembre de 2025

Sevilla. Photo Tour. 17-20 diciembre 2025. Fotos y Texto de Francisco Huertas Hernández

Sevilla. Photo Tour. 17-20 diciembre 2025.
Fotos y Texto de Francisco Huertas Hernández


Plaza de España. Sevilla
Sábado 20 de diciembre de 2025
Fotografías y Texto: Francisco Huertas Hernández


Plaza de España. Sevilla
Sábado 20 de diciembre de 2025
Video: Francisco Huertas Hernández


 "Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla, / y un huerto claro donde madura el limonero", escribió el poeta Antonio Machado, rememorando su autobiografía hispalense. Y Sevilla, quizás la ciudad más bonita de España, es también un río, grande, antiguo y misterioso: "El rio Guadalquivir / Se quejó una mañana / Me tengo que decidir / Entre Sevilla y Triana / Y yo no sé cómo elegir / Ay quien pudiera / Fundir en un perfume / Menta y canela", cantado por Lole y Manuel en su primer álbum de 1975, "Nuevo día". Uno cuando amanece en Sevilla, siente que el mundo nace como si fuera la primera vez, o, a lo mejor, como si uno hubiera vivido ya aquí en otra vida, árabe, romana, fenicia, cartaginesa o tartesia, y es que hasta los griegos nombraron a esta civilización heredera del Bronce final atlántico Τάρτησσος. Confieso que he sido un atrabiliario ignorante y movido por prejuicios deleznables nunca tuve en cuenta a mi Sevilla, a pesar de correr por mis venas sangre de flamenco y rock sevillano desde mi infancia: Lole y Manuel, Veneno, Triana, Pata Negra, Smash, hasta Derby Motoreta’s Burrito Kachimba. Y ya siendo grande, Pastora Pavón (La Niña de los Peines) o Manolo Caracol, gigantes del flamenco. Pero uno cae del caballo, abre los ojos a la luz de Andalucía y proclama su grandeza.
 Sevilla, como Granada, son ciudades en las que uno sueña pero no despierta, porque su belleza es real, palpable y entregada a los sentidos de quien mira y pasea y aspira el olor de jazmines y naranjos. Vine a Sevilla a hablar de Aleksandr Pushkin, aunque su estatua está en Granada, y de mi libro, aunque eso sea ya accesorio. Y uno no puede dejar de ir a la Plaza de España y quedar atónito ante lo que los españoles hacían a principios de siglo XX, aún destrozados por la Guerra de Cuba y el fin del imperio. En catorce años se levantó esta plaza semicircular en estilo neorenacentista, con torres, puentes y una ría artificial. Una Exposición Iberoamericana en 1929 fue la causa de esta imponente construcción que deja atónito a cualquiera. Y de allí a la Torre del Oro, edificio almohade del siglo XIII, que a medida que se alzaba fue mudejar y neoclásica, junto a ese río Guadalquivir, que nos lleva a Triana, barrio que fue siempre ciudad en el sentir de sus moradores, junto a Sevilla. Y es invierno, amigos, y uno pasea con ímpetu por esos sueños que vemos despiertos y tienen siglos de historia, porque durante centurias Sevilla fue la capital no oficial de España, la más próspera y grande de sus urbes.
 Y las tradiciones viven en la capital de Andalucía, como si su aire provinciano de salida de misa los domingos por la mañana junto al flamenco, las procesiones de Semana Santa y la Feria de Abril, dijeran al mundo que hay todavía lugares que conservan su idiosincrasia sin haber sido destruidos por la uniformización globalista de las franquicias.

Francisco Huertas Hernández
22 de diciembre de 2025






















































































































































































































Plaza del Salvador. Sevilla
Noche. 18 de diciembre de 2025
Video: Francisco Huertas Hernández










































































Plaza del Museo. Sevilla
20 de diciembre de 2025
Video: Francisco Huertas Hernández






Aeropuerto de Sevilla San Pablo
20 de diciembre de 2025
Foto: Francisco Huertas Hernández

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hermosísimo