miércoles, 5 de septiembre de 2018

PLATÓN - Apuntes Hª Filosofía. 2º Bachillerato - Francisco Huertas Hernández

HISTORIA DE LA FILOSOFÍA
Tema 1 C: PLATÓN
Bloque 1: FILOSOFÍA ANTIGUA GRIEGA
2º Bachillerato 
Profesor: Francisco Huertas Hernández



"The Cave: An Adaptation of Plato's Allegory in Clay" (2008). Michael Ramsey
Una adaptación norteamericana al cine de animación de la Alegoría (Mito) de la Caverna, de Platón

La filosofía de Platón fue la síntesis del monismo de Parménides que solo admitía una realidad (el Ser) que coincidía con lo conocido por la razón, la filosofía del devenir de Heráclito que afirmaba que el cambio es lo propio de la realidad, la influencia pitagórica de los números como estructura del universo, la teoría de una Inteligencia Ordenadora del universo defendida por Anaxágoras, y, sobre todo, la influencia de su maestro Sócrates sobre la existencia de la virtud permanente y objetiva que puede ser descubierta por medio del diálogo.
El resultado de todo ello es el primer sistema filosófico de la historia. Platón explica qué es la realidad (un conjunto de Ideas o esencias permanentes y eternas separadas de las cosas sensibles, que son una imitación de las Ideas), qué es el conocimiento (una actividad del alma racional recordando las Ideas innatas que ya poseía antes de unirse al cuerpo), qué es el ser humano (un compuesto de cuerpo mortal y alma racional inmortal, aunque Platón también consideraba que la voluntad y los deseos eran funciones de otras dos partes mortales del alma), y cómo debe ser una sociedad justa (el Estado ideal descrito en su libro más famoso, "República") en la que solo podrán gobernar los filósofos, porque solo ellos, gracias a una rigurosa y larga educación habrán purificado su alma para conocer el Bien, que es la Idea suprema, cuyo conocimiento permite gobernar justamente.
La filosofía platónica es muy atractiva en su exposición a través de "Diálogos" (género inventado por Platón) en los que, a modo de pieza teatral, Sócrates debate con discípulos y rivales (sofistas) sobre la virtud, el conocimiento y la realidad.
Y el uso que el pensador hace de unas historias llamadas mitos o alegorías para hacer claro lo más difícil se ha hecho muy popular: el mito de la caverna, la alegoría del sol, de la línea, del carro alado...
Platón fundó lo que podríamos considerar el precedente de las universidades: la Academia, en Atenas, donde estudió Aristóteles, que rechazó su racionalismo radical, que consideraba que solo las matemáticas y la filosofía son ciencias porque tratan de lo permanente y eterno


Tema 1 C: PLATÓN

PDF 1: Platón para Dummies (principiantes) (Tema completo)
PDF 2: Teoría 1 (Resumen)
PDF 3: Teoría 2. "La República" (Resumen)
PDF 4: Alexandre Koyré: "Introduction a la lecture de Platon". Análisis de la Política en "La República" (Resumen)
PDF 5: Textos Sofistas - Sócrates (según Platón)
PDF 6: Textos Platón "La República" (Alegoría del Sol, Línea, Caverna, Filósofo-Gobernante) Prueba Acceso a la Universidad
PDF 7: Vocabulario Platón
PDF 8: Ejercicios Platón 1
PDF 9: Ejercicios Platón 2. Alegoría del Sol
PDF 10: Ejercicios Platón 3. Símil de la Línea
PDF 11: Ejercicios Platón 4. Alegoría de la Caverna según Emilio Lledó
PDF 12: Ejercicios Platón 5. "The Truman Show" y la Alegoría de la Caverna"
PDF 13: Texto: Gustavo Bueno, Alberto Hidalgo y Carlos Iglesias: “Symploké. Filosofía 3º de BUP”: "Tipos de conocimiento según Platón" (Explicación de la Alegoría de la Línea)
PDF 14: Platón y Descartes. Relación
PDF 15: Platón y Nietzsche. Relación







 





6 comentarios:

ACORAZADO CINÉFILO dijo...

Platón es un pensador total, porque lo pensó todo y en su totalidad. Es decir, abarcó e inauguró áreas enteras de la realidad y el saber (aunque fuera Aristóteles el que las nombrara), y las organizó en un sistema coherente. Si la preocupación del filósofo ateniense fue política (su estancia en Siracusa como consejero político de Dionisio) o ética (la huella del intelectualismo moral y el ejemplo vital de su maestro Sócrates), o solo metafísica (la búsqueda de la esencia permanente de lo real más allá del velo y la multiplicidad de las apariencias cambiantes), eso dependerá de nuestra lectura o interpretación.
Para unos Platón es un pensador autoritario (Popper), pero para otros un crítico de la opinión y la demagogia política, es decir, un defensor de la libertad de pensamiento. Para unos es un pensador teológico (el Bien absoluto coincide con la experiencia religiosa del Dios monoteísta), para otros es un pensador materialista (G. Bueno). Platón fue poeta, pero condenó el arte imitativo de los poetas (por alejar de la verdad). Y, sin embargo, también fue un consumado escritor, inventor de un género literario: el diálogo, mezcla de teatro, ensayo e historia.
Platón es uno de los cuatro grandes pensadores totales de la historia, junto a Aristóteles, Kant y Hegel (quizás habría que añadir a Tomás de Aquino)
Leer a Platón es sorprendente, porque hay más "platones" en su obra de lo que aprendéis en clase: su evolución desde los diálogos socráticos (Critón, Laques) hasta los diálogos finales (Parménides, Sofista, Timeo, Leyes) nada tiene que ver con los estereotipos del dualismo maniqueo que transmite la pedagogía del bachillerato. En Platón hay cuerpo, deseo, arte, conflicto, materialidad, frenesí, embriaguez, oscuridad fecundante, junto a esa luz archisabida de la salida de la caverna.
La única manera de entender a Platón es repensar nosotros los problemas del ser humano y la realidad usando ese método socrático tan vivo y democrático: la conversación, el debate, la polémica argumentada. No solo es dialéctica el método platónico, hay allí también retórica, pathos estético, elevación erótica y mística.

Unknown dijo...

Platón es un compañero de viaje. Quiero compartir con vosotros unas líneas de su Carta VII:

"Siendo yo joven, pasé por la misma experiencia que otros muchos; pensé dedicarme a la política tan pronto como llegara a ser dueño de mis actos... (El gobierno de la recién restaurada democracia en Atenas tras la guerra del Peloponeso) entre otras tropelías que cometieron, estuvo la de enviar a mi amigo, el anciano Sócrates, de quien yo no tenía reparo en afirmar que fue el más justo de los hombres de su tiempo, a que, en unión de otras personas, prendiera a un ciudadano para conducirle por la fuerza para ser ejecutado... Y me vi obligado a reconocer, en alabanza de la verdadera filosofía, que de ella depende el obtener una visión perfecta y total de lo que es justo, tanto en el terreno político como en el privado, y que no cesará en sus males el género humano hasta que los que son recta y verdaderamente filósofos ocupen los cargos públicos, o bien los que ejercen el poder en los Estados lleguen, por especial favor divino, a ser filósofos en el auténtico sentido de la palabra"

Estas palabras escritas por el anciano Platón en una carta contienen la misma enseñanza de la "República" (Πολιτεία): solo el conocimiento nos hace libres, es decir, justos, buenos. Pero el conocimiento no puede depender de los cambios físicos y sociales que nos circundan: el devenir (γένεσις), o sea, lo que nace, pasa y muere, lo que es distinto en cada uno. Eso es la opinión (δόξα). Debe haber un conocimiento necesario y universal, permanente (ἐπιστήμη), en el cual lo justo sea igual para todos y para todas las épocas. Platón, como buen matemático, comprendió que si los números y las figuras geométricas son perfectas y permanentes, también debería haber en el campo de los conceptos morales una permanencia que permita a los hombres y mujeres guiarse con firmeza en la justicia. Que no se llame justicia al acto de los jueces que condenaron a Sócrates. Ellos serán jueces pero no conocen la justicia. Por eso hay que invocar al filósofo, aquel que desinteresadamente busca la verdad, más allá de lo cambiante y subjetivo. En las ideas. Las ideas no son nuestros pensamientos, son las esencias perfectas de lo que en este mundo no es más que imperfecta copia. ¡Qué lejos de la justicia en sí estaban los jueces que condenaron a Sócrates! ¡Qué pálida copia de la justicia aplicaron, aunque el obstinado Sócrates acató la sentencia por obediencia a las leyes de Atenas, y murió tras beber la cicuta!
Las leyes de los hombres no son justas si no se basan en el conocimiento de las ideas. No es en las costumbres, ni en la historia, ni en el poder de los estados, ni los gustos, donde hay que buscar la esencia de lo justo, sino en la proporción exacta y armónica de las virtudes de la moderación, la valentía y la sabiduría/prudencia, propias de las distintas partes del alma y sus equivalentes clases sociales.

ACORAZADO CINÉFILO dijo...

Platón es un pensador celeste que no renuncia a lo terrestre. Todos los que lo descalifican como alucinado impostor de mundos quiméricos olvidan que en su Carta VII (texto autobiográfico) nos dice que el objetivo de la filosofía es "salvar la ciudad/estado". Es decir: implantar la justicia y la racionalidad en el mundo histórico, el del devenir, la opinión y la apariencia. El de las costumbres, prejuicios, tradiciones, ambiciones, pasiones, y, en definitiva, imperfección.
Para poder llevar a cabo esta misión tenemos que partir de un modelo, un criterio de acción, de valoración, de medida, y eso solo puede proceder de un patrón intelectual que hay que imaginar como perfecto, estable, permanente. Son las IDEAS, reguladoras de la acción y la valoración en el mundo histórico. Pero desde la historia no se comprende nada. Desde el devenir no se comprende nada. Desde la apariencia múltiple de cambiantes costumbres relativas nadie puede juzgar ni gobernar con justicia.
Subordinar todo el sistema de pensamiento platónico a la política (justicia) es la interpretación que puede darse a la Carta VII, pero no puede olvidarse que la filosofía de Platón no es un sistema acabado, sino en construcción dialéctica expresada en la conversación (a veces, disputa antisofística o antiretórica) entre varios logos que confrontan su libertad de pensamiento y dan al pensamiento el impulso de la vida (quizás Platón sea el único filósofo que puede pensar desde la embriaguez: recordemos el célebre pasaje final del "Banquete" en que Sócrates resiste la bebida despierto y con su raciocinio incólume) y el movimiento. ¡Extraña paradoja que el cantor de lo eterno y lo estático del cosmos inteligible lo exprese a través de las voces múltiples de hombres (y una mujer sabia: Diotima) efímeros, en el movimiento permanente de sus paseos, sus conversaciones, sus tentativas de definir las virtudes (sin éxito en los primeros Diálogos)!
La filosofía de Platón tiene una vida móvil que se manifiesta en sus obras finales donde la idea de "movimiento" llega a ser una de las 5 ideas constitutivas básicas, junto al "reposo", "identidad", "diferencia" y "ser". ¿Cuántos Platones caben en Platón? ¿Su pensamiento está vivo y en evolución (nunca supimos de qué hay ideas: si al principio cada cosa física tenía su modelo inteligible, al final parece reducirlo todo a unos pocos principios lógico-ontológicos) o es una descripción petrificada de un orden cualitativo-cuantitativo abstracto solo accesible a la razón?
Platón, el pensador que nunca pensó más que por la voz de su alter-ego, Sócrates, separó la realidad en dos mitades, y "cosió" el abismo (χωρισμός) con una hipótesis verosímil, el Demiourgos (Δημιουργός), un modelador matemático inspirado por el Bien de todo lo sensible.
Platón, el divino, del que Hölderlin escribió el bello verso: "Wo mein Plato Paradiese schuf" (donde mi Platón forjaba Paraísos), nos invita a pensar dialogando para elevarnos desde la voz a la esencia bondadosa de las cosas (ideas) ideales que nos permitirán elevarnos también en este mundo histórico

Sin perder la esperanza de un mundo mejor dijo...

La caverna debe ser muy amplia y tengo la impresión que cada vez hay más personas aglutinadas que no quieren salir de ella y ni tan siquiera se hacen preguntas. Se olvidan del beneficio de la duda.

Anónimo dijo...

Estos apuntes son muy buenos señor. Nosotros los usamos aquí mucho. Roberto. Asunción

ACORAZADO CINÉFILO dijo...

Gracias Roberto. Pues sí, puse todo mi empeño en que fueran útiles y claros. Es el fruto de largos años enseñando en España. Ya no soy más profesor. Ahora soy jubilado. Francisco