sábado, 10 de octubre de 2020

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев. "Dva Fyodora" (1958). M. Jutsiev. "Los dos Fiódor". Estrella Millán Sanjuán & Francisco Huertas Hernández

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev 
"Los dos Fiódor"
Imágenes, textos de imágenes y complementos: Francisco Huertas Hernández
Texto central: Estrella Millán Sanjuán


"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-большой (Василий Шукшин) & Фёдор-малый (Коля Чурсин) -  Fyodor grande (Vasiliy Shukshin) & Fyodor niño (Kolya Chursin)
La comida es el bien terreno que complementa la paz, ese bien celeste que la URSS convirtió en un valor inherente a su política y su idiosincrasia

 Leer este completo blog me permitió descubrir a este estupendo director, Марлен Мартынович Хуциев (Marlen Martynovich Jutsiev) (1925-2019), por el análisis realizado por Francisco Huertas Hernández de varias de sus películas. Hace unos días quise conocer dos más y me decidí a escribir sobre una de ellas.

 Ésta es la segunda película de este longevo director, que obtuvo el Premio especial del Jurado de la Mostra de Venecia ex aequo en 1965 junto con Buñuel por la magistral y censurada película en su país "Мне двадцать лет" (Tengo 20 años), la cual le concedió un gran prestigio. Aunque años después se sumergió en el olvido internacional al que tampoco la posterior Perestroika, que posibilitó la distribución de mucho cine soviético en Europa, ayudó demasiado. No fue hasta mucho tiempo después, en 2013, cuando empezó a reivindicarse su figura y genial trabajo en distintos Festivales y Filmotecas, visitando personalmente distintos países y expresando su asombro por el interés fuera de su país por su obra.

 Un director graduado después de la Gran Guerra Patria (2ª G.M.) en el VIGK, formado por Sávchenko (al que homenajea dando su nombre a un personaje principal en su 1ª película) en la importancia del pensamiento metafórico y en la capacidad del arte de crear asociaciones. Rodeado de compañeros como Tarkovski, Venguerov, Parajanov o Chujrai, que desarrollaron una gran carrera.

 Sus dos primeras películas fueron emblemáticas en lo que se denominó el deshielo de Jruschov, etapa de aperturismo después de Stalin. "Весна на Заречной улице" (Primavera en la calle Zarechnaya) fue un debut más que digno y la que nos ocupa, "Два Фёдора" (Los dos Fyódor), no gustó demasiado al gobierno por no ensalzar lo suficiente la victoria en la guerra y que el protagonista, un joven soldado, no fuera presentado como un héroe, sino como un ser taciturno y melancólico.

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Título

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Escena inicial del tren entrando en plano con los soldados que regresan del frente. En el frontal de la locomotora se lee "Победа!" (Pabieda!) que significa "¡victoria!", junto a un retrato de Lenin. Los soldados del Ejército Rojo victoriosos sobre los ejércitos nazis en la Gran Guerra Patria (junio 1941- mayo 1945) (Великая Отечественная война)

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Otro tren entrando en plano con los soldados que regresan del frente. Leemos en la locomotora: "наше дело правое!" (¡nuestra causa es verdadera!) y "мы победели!" (¡ganamos!) junto a un retrato de Stalin. Un subgénero cinematográfico es el de las películas de "regreso de los soldados al acabar la contienda". Existe una obra maestra absoluta sobre este tema: "The Best Years of Our Lives" (1946). William Wyler. Mucho más dura que ésta, pero menos poética. La recuperación de la vida civil tras la guerra es difícil, en ocasiones traumática. En el cine de Hollywood no hay miseria económica, porque, en realidad, el país no sufrió la guerra en su suelo y aprovechó para consolidarse como primera potencia económica. La URSS, sin embargo, fue la nación que más muertos tuvo en la contienda (entre 27 y 37 millones de soviéticos murieron en la Gran Guerra Patria), y la que más arrasada quedó. Stalin fue despiadado en el avance sobre Berlín como contrapartida. Tarkovski presentó a su héroe niño despiadado en la toma de Berlín: "Иваново детство" (La infancia de Iván) (1962)

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-большой (Василий Шукшин) - Fyodor grande (Vasiliy Shukshin) 
Presentación del personaje tras un plano secuencia del tren parado en el campo con los soldados descansando. En escorzo

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-большой (Василий Шукшин) & Фёдор-малый (Коля Чурсин) -  Fyodor grande (Vasiliy Shukshin) & Fyodor niño (Kolya Chursin)
Presentación del niño que ha robado pan a unas campesinas. El hambre infantil tras la guerra. El encuentro de dos soledades que sellarán una solidaria amistad paternofilial. El niño ha quedado huérfano de padre, de nombre Vasiliy, soldado, muerto en la guerra

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-большой (Василий Шукшин) & Фёдор-малый (Коля Чурсин) -  Fyodor grande (Vasiliy Shukshin) & Fyodor niño (Kolya Chursin)
Primera conversación en el tren: las dos soledades. La desolación que toda guerra deja en las almas y los cuerpos, en las comunidades desmembradas

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-большой (Василий Шукшин) & Фёдор-малый (Коля Чурсин) -  Fyodor grande (Vasiliy Shukshin) & Fyodor niño (Kolya Chursin)
La casa familiar arrasada. El desarraigo de Fyodor grande. Al fondo del plano, Fyodor chico

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-малый (Коля Чурсин) -  Fyodor niño (Kolya Chursin)
Niños de suburbio

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-малый (Коля Чурсин) - Fyodor niño (Kolya Chursin)
Fyodor pequeño llega a la ciudad. Este plano me trae a la memoria a otro niño pobre, Bruno Ricci, de "Ladri di biciclette" (1948). Vittorio de Sica. Niños y ciudades en países asolados por la guerra. Ambas películas tienen un fuerte parentesco

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-малый (Коля Чурсин) - Fyodor niño (Kolya Chursin)
Un niño en un mundo de adultos

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-малый (Коля Чурсин) - Fyodor niño (Kolya Chursin)
Un niño que se alza en el mostrador de una tienda para ver (y entender) la vida adulta, la de guerrear, comerciar, hacerse el importante, perseguir ideales, correr tras el amor, restañar las heridas...

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-большой (Василий Шукшин) - Fyodor grande (Vasiliy Shukshin) 
En admirables planos los personajes se vuelven hacia el espectador. Jutsiev (Khutsev) es un director eminentemente poético que eleva la realidad cotidiana. Fyodor grande trabaja en la construcción, o, mejor dicho, en la "reconstrucción" de lo que fue destruido en la cruenta guerra. Es importante señalar la presencia constante de la música en la película. La poesía de Jutsiev resulta de la feliz conjunción de la banda sonora y la planificación visual de tintes poéticos a partir de la realidad cotidiana. Yuliy Sergeievich Meytus (Юлий Сергеевич Мейтус) (1903-1997), autor de la música del film, fue un compositor de origen ucraniano. Compuso 18 óperas, sinfonías, obras vocales y música de cine. Esta partitura sinfónica bellísima y eminentemente lírico-dramática realza la hermosa historia contada con mano maestra visual y narrativamente por Marlen Jutsiev

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-малый (Коля Чурсин) & Фёдор-большой (Василий Шукшин) -  Fyodor niño (Kolya Chursin) & Fyodor grande (Vasiliy Shukshin) 
Tras el trabajo en la obra llega el pequeño Fyodor con la comida. En un gesto de gran ternura ofrece una especie de guindillas a Fyodor viejo

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-большой (Василий Шукшин) - Fyodor grande (Vasiliy Shukshin) 
Expresivo primer plano de Fyodor adulto en la obra. Son planos como éste los que elevan la película desde lo descriptivo a lo lírico. Desde lo social a lo psicológico

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Наташа (Тамара Сёмина) - Natasha (Tamara Syomina)
Presentación del personaje. De nuevo Jutsiev introduce a un personaje con un escorzo de giro hacia el espectador

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-большой (Василий Шукшин) & Фёдор-малый (Коля Чурсин) -  Fyodor grande (Vasiliy Shukshin) & Fyodor niño (Kolya Chursin)
El festín de los pobres. No hay bocado honesto para el desamparado: El pequeño Fyodor robó el pollo a una vecina. Fyodor grande había perdido sus cupones de racionamiento de comida. No es ésta una película que se recree en el dolor de la pobreza postbélica (a diferencia de la otra cinta mencionada, "Ladri di biciclette", también protagonizada por un adulto y un niño), sin duda por la censura establecida por la estética imperante del "realismo socialista". Loar a la clase obrera, al sujeto colectivo revolucionario, es la consigna del arte soviético, pero con el "deshielo" tras la muerte de Stalin, se abre paso un "nuevo cine soviético" más volcado hacia la mirada psicológica y existencial. Jutsiev es su más alto exponente. Puedo afirmar sin rubor que es uno de los directores más geniales de la historia del cine, por esa síntesis de introspección de sus personajes, descripción de la ciudad, lirismo de la cámara y la banda sonora y perdurable recuerdo de sus historias

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-большой (Василий Шукшин) & Фёдор-малый (Коля Чурсин) -  Fyodor grande (Vasiliy Shukshin) & Fyodor niño (Kolya Chursin)
Un profundo sentido moral surge en el gran Fyodor que rechaza el apetitoso pollo robado: "Я рабочий человек" (Soy un (hombre) trabajador) sentencia Fyodor grande. No es un ladrón. Una lección moral para el pequeño Fyodor que aún cree que robar es un medio lícito de supervivencia

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-малый (Коля Чурсин) - Fyodor niño (Kolya Chursin)
En otro movimiento en escorzo cara al espectador el personaje del pequeño Fyodor avergonzado ante la recriminación serena del gran Fyodor. Este plano nos muestra otra de las virtudes del film: la fotografía de Пётр Ефимович Тодоровский (Pyotr Efimovich Todorovskiy) (1925-2013), cuyo dominio en el claroscuro es seña de esta película. Recordemos también la maravillosa escena en la que el gran Fyodor se despide del pequeño en un andén, y, tras dudar, se va con él. En mitad de la noche, y entre sombras, Todorovskiy y Jutsiev crean un cuadro visual con influencias de Rembrandt, Caravaggio y el cine expresionista

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
La dramática escena coral del tanque aparecido entre los escombros

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-малый (Коля Чурсин) - Fyodor niño (Kolya Chursin)
El horror del niño al recordar a su padre muerto en un tanque en la prodigiosa escena de montaje alterno del rescate del tanque y el terror infantil. Antes, el director, ha mostrado al pueblo, como coro silente de tragedia griega, rodeando entre las ruinas el fatal hallazgo. La memoria de la guerra perseguirá a los vencedores (soviéticos) y a los vencidos (alemanes), porque como dijo Stalin a Churchill en Potsdam o Yalta, "al final solo gana la muerte". Este primer plano remite, en el contexto del montaje, a los maestros Eisenstein o Pudovkin

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-большой (Василий Шукшин) - Fyodor grande (Vasiliy Shukshin) 
Наташа (Тамара Сёмина) - Natasha (Tamara Syomina)
El baile. Siempre hay un baile en el cine soviético de los 50 y 60. El baile es el tiempo de recreo de los trabajadores (y el cine). En la URSS hombres y mujeres eran trabajadores en la reconstrucción del país tras la guerra. En este plano, unos tímidos Fyodor y Natasha hacen las presentaciones. Ella había aparecido en una escena sin continuidad, y ahora es la mujer más guapa del mundo para él. Bailan a ritmo de vals (recordemos los valses de Shostakovich)

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-малый (Коля Чурсин) - Fyodor niño (Kolya Chursin)
Фёдор-большой (Василий Шукшин) - Fyodor grande (Vasiliy Shukshin) 
Наташа (Тамара Сёмина) - Natasha (Tamara Syomina)
La pareja quiere pasear sin la presencia del niño. La "unidad familiar" entre los dos Fyodor es "amenazada" por la presencia de la mujer

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-большой (Василий Шукшин) - Fyodor grande (Vasiliy Shukshin) 
El amor te quita el sueño, te hace escuchar "valses" en el silencio de la noche, y te arrastra a la calle a un deambular sin sentido, incluso te convierte en "acróbata", haciendo el pino. El pequeño Fyodor, en contraplano, observa atónito al despertar a su "padre" adoptivo bajo el hechizo del amor y mira la luna entre las nubes (el lunático). Jutsiev filmó escenas parecidas, pero con una madurez mayor, en su obra maestra, "Мне двадцать лет" (Tengo 20 años), estrenada censurada en 1965

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-малый (Коля Чурсин) - Fyodor niño (Kolya Chursin)
El niño hace los deberes en la noche. La película ha devenido "nocturna" con la aparición del amor. Hay abundancia de escenas de noche. Desde el influjo lunático del baile y el insomnio del gran Fyodor las "fuerzas oscuras" del deseo toman su lugar frente a las "tareas luminosas" del trabajo. El pequeño deambula por la ciudad de madrugada, desamparado, buscando la protección de su "padre" adoptivo en planos de fabulosa iluminación en claroscuro. Los celos amenazan la armonía de los dos Fyodor

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-малый (Коля Чурсин) - Fyodor niño (Kolya Chursin)
Фёдор-большой (Василий Шукшин) - Fyodor grande (Vasiliy Shukshin) 
Pintando y acondicionando la casa para la llegada de Natasha. El niño siente que queda excluido en parte del afecto de su benefactor

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-большой (Василий Шукшин) - Fyodor grande (Vasiliy Shukshin)
Наташа (Тамара Сёмина) - Natasha (Tamara Syomina)
Banquete de boda. Las canciones populares cantadas a coro en la celebración, junto con las escuchadas en escenas anteriores enmarcan al personaje del pueblo ruso con su lirismo triste. La música es una presencia constante en la vida de sus gentes: cantando en el trabajo, en las comidas, o escuchando el gramófono, como hace el pequeño Fyodor antes de dormir

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
"Los dos Fiódor"
Фёдор-малый (Коля Чурсин) - Fyodor niño (Kolya Chursin)
Una de las pocas escenas no realistas del film: el pequeño Fyodor, huérfano quizás dos veces, se refleja en el cromado de su cama, tras el banquete de boda.
El drama se desarrollará por el sentimiento de abandono del niño

 Esta película fue rodada ya en solitario, después de la colaboración en la anterior de Feliks Miróner, un compañero de estudios, y en ella se aprecia su pasión por el Neorrealismo italiano. Y ese homenaje lo observamos en el aire documental de algunas secuencias, la utilización de actores no profesionales, mucho espacio exterior y un relato cargado de veracidad.

 Podemos también observar en esta obra las constantes en el cine de Jutsiev: personajes con una pátina de tristeza, añoranza, como la protagonista de "Июльский дождь" (Lluvia de Julio) y la maestra de “Primavera en la calle Zarechnaya”; una predilección por enseñar el corazón y vida de las ciudades, como ese Moscú grandioso de “Tengo 20 años” que tanto adoraba; mujeres modernas, trabajadoras en puestos impensables como esa chica que maneja una grúa de construcción en este film; secuencias documentales de fábricas, demoliciones, ciudades que se regeneran después de la guerra; referencias a las consecuencias de la Gran Guerra Patria en este soldado solitario, Fiódor, el padre fallecido de Seriosha de “Tengo 20 años”, que mantiene una conversación con él en una escena onírica muy sentimental, la reunión de veteranos en “Lluvia de julio” o la posguerra de "
Был месяц май" (Fue en mayo) (1970).

 También es una constante en él la apertura de sus películas con secuencias muy impactantes, largas, sin texto y alejadas del argumento, como ese recorrido fastuoso del tren de la que voy a describir, o los tres soldados que caminan por las calles mirando a cámara en un bello primer plano y que después pasa al sonido de los pasos del soldado licenciado por las calles mojadas y nocturnas de “Tengo 20 años”. También los espectaculares siete minutos de comienzo documental de la guerra en “Fue en mayo”. Introducciones que constituyen una historia en sí mismas, con entidad propia, muy líricas y creadoras de un estado de ánimo concreto. Quizá su aporte al realismo fue la especial poesía que sabía añadir con su puesta en escena e imágenes, y su predilección por los paisajes y localizaciones bellas, fruto de su pasión por la pintura, en el que también influiría lo aprendido con su gran maestro Sávchenko.

 Como podemos leer en una entrevista poco antes de morir en la revista “L’Atalante”, la fijación que sentía por la guerra era fruto de la deuda que sentía con sus coetáneos por no haber podido participar en ella debido a diversas enfermedades, así como su espíritu crítico venía de haber sufrido la detención y desaparición de su padre comunista.

 Y el nombre elegido para él (Mar por Marx y len por Lenin) pareció conducirle desde la infancia hacia un objetivo concreto. Según cuenta en esa entrevista: “Todas mis películas crecen de la reflexión y los sentimientos y no me gusta la pura pomposidad espiritualista, así como hacer gala de efectismo formal”.

 De hecho, Tarkovski reconoció en una ocasión que “aprendió a hacer cine de verdad con Jutsiev”, ya que eran compañeros y colaboraron en su 3ª película, al darle un pequeño papel un tanto antipático al joven todavía maestro del cine.

 “Los dos Fiódor” es una película que comienza con un dinamismo y un ambiente triunfal simbolizado en un tren que más que ir por raíles parece volar por la ubicación muy baja de la cámara en un contrapicado fabuloso en el que pasa casi por encima de ella muy velozmente. Este tren está adornado por flores y exhibe en su primer vagón la palabra "Победа!" (Pabieda!) (¡Victoria!) con la imagen de Lenin en grande. Los soldados que vuelven de la guerra están exultantes, cantan y gritan alegres por el regreso a los hogares que tanto anhelan. Los campesinos que se encuentran trabajando en el campo los saludan animosamente como héroes. Se cruzan con otro tren también repleto de soldados victoriosos que se contagian de la euforia. Una introducción de ésas largas que el director tanto amaba, sin diálogos, que nos sumerge totalmente en el ambiente, al que da un giro radical en un determinado momento. La excitación da paso a la realidad en una parada del tren en que se reparten panes y observamos un niño que es reprendido por una mujer por coger un pan por el hambre. Inmediatamente entra en escena el protagonista, un joven soldado con nobleza que lo protege y termina haciéndole subir al tren, decisión que hace comenzar de nuevo el relato con un tono muy distinto. Este soldado es interpretado por el genial actor Vasiliy Makárovich Shukshín, en su primer papel en el cine, convirtiéndose luego en un director y escritor famoso.

 A partir de aquí asistimos a un tono melancólico cargado de poesía visual que no necesita texto para hablar por sí mismo sobre las injustas consecuencias en el pueblo. Casas derruidas completamente, calles solitarias en ruinas, o la casa del protagonista que mantiene solo sus muros, sin un techo en que cobijarse. La escena en que prepara una cama a la intemperie para dormir abrazado al niño huérfano y solitario con cantos de guerra es de una ternura sin igual. Jutsiev realiza una historia dulce, sin caer en la fácil sensiblería, donde su genialidad procura trascender la cotidianidad en momentos sublimes. La relación que se establece entre el niño y el soldado nos habla de la honestidad y nobleza de las personas, una relación simbiótica de un chico sin familia, errante y superviviente a marchas forzadas (recuerda un poco a “La infancia de Iván” de Tarkovski, aunque en una historia menos oscura), que encuentra en la soledad y melancolía del Fiódor mayor a su alter ego, de ahí la bella decisión de llamarlos igual. La complicidad que se establece entre ellos está reflejada con una sola imagen, tan sencilla, como elocuente. Fiódor pequeño imita la forma de caminar y la posición de manos detrás de la espalda del mayor mientras pasean en actitud cariñosa, sin hablar, por la ciudad.

 Pero el que sea una historia sencilla en su argumento no evita que contenga un mar de fondo acerca de las terribles consecuencias de la guerra, que se ceba en las clases bajas como siempre. Un cine muy alejado del propagandístico que hacía de la victoria del ejército un vehículo de triunfalismo y afán de levantar la moral.

 Este director sabe expresar de forma muy distinta que son las propias personas anónimas las que son capaces de regenerar sus vidas, trabajar en equipo, demoler las ruinas y reconstruir sus amputadas vidas. Por eso insiste tanto en crear planos muy llamativos del pueblo arreglando sus casas (a destacar el travelling ascendente por el muro de la casa de Fiodor hasta abrirse y verse la calle y demás personas trabajando en común), retirando las ruinas o plantando árboles en una delicada escena en la que las mujeres cantan y Fiódor se fija en una de ellas: Natasha. Jutsiev siente predilección por la naturaleza, hay planos del campo muy líricos desde los trenes, él se autodenominaba diciendo: “soy un contemplador” y eso lo transmite en todas sus secuencias a las que dota de un naturalismo muy especial. La plantación y riego simboliza el espíritu de optimismo del que lo ha perdido todo, pero se resiste a seguir viviendo con las calamidades. Y se mantienen unidos cuando un vecino muere sepultado en las demoliciones en un plano fabuloso y triste, quitándose las gorras en señal de duelo por el fallecido, al ayudar a traccionar un tanque que se alza amenazante de manera efímera por los amargos recuerdos, en un estupendo contrapicado. Me resulta muy interesante la imagen de todo el pueblo siguiendo lentamente al tanque con tristeza.

 El gusto por el cine italiano le conduce a rodar una secuencia casi documental de un baile popular excelente. Fiódor grande intenta el acercamiento a la bella Natasha en una secuencia en la que el director no se hace notar, que constituye su gran virtud y la cámara observa tranquilamente el proceso de forma delicada, sin aspavientos, con un giro que enfoca a los bailarines hasta presentarla a ella de pie, que está deseando entablar contacto con el soldado.

 La construcción posterior del hogar está bellamente filmada, limpiando entre los dos chicos las ventanas, arreglando el tejado, pintando las puertas y empapelando las habitaciones. Una secuencia muy significativa y cálida, tan cotidiana como hermosa.
 El inicio de este idilio y la posterior boda provocan los celos del niño, que se siente desplazado e intenta por varios medios llamar la atención. Con su huida para buscar a una tía inexistente, somos testigos de una secuencia nocturna deudora de un cierto expresionismo, con un juego de luces y sombras por la estación de tren que muestra los sentimientos de angustia y remordimiento del soldado. Su sentimiento es de un hermano o padre de este niño, y tiene uno de los mejores primeros planos que he visto de la infancia en el cine. Es increíble cómo sostiene la mirada ante la cámara y con qué madurez actúa para su corta edad.

 El final es el único en la filmografía de Jutsiev que no acaba de forma metafórica o emocional, alejado del argumento. La película se cierra con una afectuosa mirada, sin diálogos y una corta frase de Natasha que encierra mucho más de lo que podemos pensar para ese chico. Una historia que ensalza la calidez y la generosidad en las relaciones humanas. Una película de esas que no están basadas en grandes diálogos, sino que atrae y cuenta más por sus planos y miradas, por las actuaciones. Y eso es mérito del director.

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev
Poster original

 Marlen Jutsiev fue un cineasta con una alta sensibilidad, no hizo un cine pretencioso, muy al contrario, sino contemplativo, con momentos e imágenes de exaltación muy poéticos. Su cine es delicado, sencillo, humano, muy bien contado y con espíritu crítico. Sabía ensamblar muy bien las partes documentales con escenas cotidianas, así como su etapa en la que fue un excelente representante de la nueva ola rusa es de lo más destacable

Texto central: Estrella Millán Sanjuán
Cádiz, 2 de octubre de 2020


Два Фёдора
1958
СССР
Длительность: 83 мин.
Режиссёр: Марлен Хуциев
Автор сценария: Валерий Савченко
В главных ролях: Василий Шукшин, Тамара Сёмина
Оператор: Петр Тодоровский
Композитор: Юлий Мейтус
Текст песни: А. Фатьянова
Звукорежиссёр: В. Курганский
Монтаж: Э. Майская
Художник-постановщик: О. Гроссе
Кинокомпания: Одесская киностудия
Жанр: мелодрама
В ролях:
Василий ШукшинФёдор-большой
Коля Чурсин Фёдор-малый
Тамара СёминаНаташа
Юра Елин
М. Шаманская
И. Полетаев
Александр Александровский
Н. Лопатников
К. Забашта
Николай Ключнев

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev 
Película completa en ruso. HD

"Два Фёдора" (1958). Марлен Хуциев
"Dva Fyodora" (1958). Marlen Jutsiev 
Película completa con subtítulos en inglés


16 comentarios:

Unknown dijo...

En la versión de celular no aparecen los videos del film

Unknown dijo...

Impresionante post de una película que nadie conoce fuera de Rusia. Y es una maravilla

Francisco dijo...

He visto esta preciosa película con el sello inconfundible de Marlen Jutsiev en internet. Primero en una versión HD solo en ruso, pero no me enteraba bien del argumento. Luego una de menos calidad de imagen con subtítulos en inglés. Mi impresión como espectador es la siguiente: Jutsiev describe la realidad cotidiana elevándola a un poético lirismo (valga la exageración) mediante la cámara y la música (mezcla de partitura original y cantos populares corales). Las consecuencias civiles de la guerra con la reconstrucción de ciudades y almas, y la relación paternofilial de un soldado que regresa del frente (en tren, algo tan querido del cine soviético) y un niño huérfano al que adopta. La interpretación de los dos Fyodor es luminosa, y triste, como todo el cine de este maestro melancólico, uno de los genios absolutos del séptimo arte que no tuvo la suerte de nacer en Estados Unidos, y que, además representa el cine soviético, que, no se lo pierdan, no es ni propagandístico ni colectivista, sino lírico, existencial y psicológico, sin dejar de lado al pueblo, soberano protagonista de la historia y la cultura rusas desde tiempos remotos. La fotografía en claroscuro, la música, los encuadres, los paisajes, todo confluye con la tierna historia contada sin sentimentalismos en una delicia del cine universal, que antecede las tres grandes cimas del director. Estrella Millán Sanjuán ha sabido contar todo esto a la perfección porque es especialista en la obra de este autor, amante del cine soviético y persona de gusto y sensibilidad exquisita

Estrella dijo...

Me encanta el resultado final. Sin duda tu gran aportación en la parte central, describiendo tan maravillosamente los fotogramas que incluyes, es excelente.
Esta película desconocida debería conocerse en todo el mundo. Sencilla, sensible, melancólica, bella. Con personajes anónimos elevados a lo más alto. Historias de generosidad, altruismo, regeneración. Jutsiev es un grande y cada vez lo tengo más claro.
Lo que nos hemos perdido, pero nunca es tarde.
Gracias, Francisco Huertas Hernández, por tu aportación, tu pasión y por darme a conocer a este genio. Un abrazo.

Unknown dijo...

Increíble

Unknown dijo...

Estas críticas son tan necesarias que nos gustaría tenerlas todas juntitas en un libro. Que yo sepa no hay en español algo así

antonio pardines dijo...

He disfrutado mucho de la lectura. He leído pasión en la descripción y en los comentarios, en cada párrafo y a pie de foto. Estrella, Francisco, os agradezco el ir a "contracorriente" y recorrer otro tipo de cine, uno muy bueno, uno que vale la pena descubrir o/y recordar. Saludos

Paco Sepúlveda dijo...

Extraordinario análisis.
¡¡¡¡BRAVO!!!!

Merinesa dijo...

No sé ya qué decir para agradecer otra vez estos análisis fílmicos que en sí mismos son otra obra de arte. Maravilla.

Estrella dijo...

Gracias.

Estrella dijo...

Gracias, Toño. Un placer que lo hayas leído.

Estrella dijo...

Gracias.

MaryHall dijo...

Muy interesante, sentido y trabajado análisis de una peli que desconozco, pero que con la lectura de este estupendo comentario dan muchas ganas de ver. Desde luego, por las imágenes seleccionadas, se intuye una belleza contemplativa y poética, como bien has apuntado, que la hace muy atractiva. Muchas gracias por la pasión y la recomendación. La veré en cuanto pueda (creo que antes debería acercarme a "Tengo 20 años").

MaryHall dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Sabés dónde puedo encontrar subtítulos para esta película. Gracias

Francisco dijo...

Creo que en español no hay. Pero en inglés los tienes en la versión de Youtube que hay en este post en su edición para PC