sábado, 18 de junio de 2022

Sócrates: caso abierto. ¿Inocente o Culpable? Entre Platón ("Apología", "Critón") y Nietzsche ("Crepúsculo de los ídolos") Alba Fernández Candela. Filosofía 1º Bachillerato. IES V. Kent. Elx. 2007-2008. Profesor: Francisco Huertas Hernández

Sócrates: caso abierto. ¿Inocente o Culpable? Entre Platón ("Apología""Critón") y Nietzsche ("Crepúsculo de los ídolos")
Comentario
Alumna: Alba Fernández Candela
Asignatura: Filosofía
1º Bachillerato C
IES V. Kent. Elx. 2007-2008
Profesor: Francisco Huertas Hernández

Sócrates: caso abierto. ¿Inocente o Culpable? Entre Platón ("Apología", "Critón") y Nietzsche ("Crepúsculo de los ídolos")
Comentario
Alumna: Alba Fernández Candela
Asignatura: Filosofía
1º Bachillerato C
IES V. Kent. Elx. 2007-2008
Profesor: Francisco Huertas Hernández
Página 5

Σωκράτης (Sócrates) (Atenas, 470 aC - Atenas 399 aC)
Busto romano de mármol. Siglo I. Copia de una estatua de bronce perdida del escultor Λύσιππος (Lisipo) (390-318 aC)
Portrait of Socrates. Marble. Roman artwork (1st century), perhaps a copy of a lost bronze statue made by Lysippos

Sócrates (470-399 aC), el filósofo que no escribió nada, y que enseñó por las plazas mediante el diálogo. Esto hace que sea difícil saber cuál fue el verdadero Sócrates, ya que lo que sabemos de él es a través de los Diálogos de Platón.
Sócrates busca una justificación filosófica (racional) de la vida humana (conducta). Su preocupación es, pues, la ética: la vida virtuosa es la única realmente digna.
Sócrates encuentra que es el alma (ψυχή) la esencia del hombre. El alma es la conciencia, la capacidad de entender y de querer. “Conócete a ti mismo” (sentencia inscrita en templo de Apolo en Delfos) implica este autoconocimiento del alma.
Si el ser humano es el alma, la virtud consiste en el “cuidado del alma”, consiguiendo que ésta sea lo mejor posible. Puesto que el alma es pensamiento, la virtud es el desarrollo del pensamiento. Ésta es la “ciencia” socrática: el conocimiento moral
Si la virtud es ciencia, se siguen dos consecuencias: a) existe una sola virtud (fundamento de todas las demás); b) Nadie hace el mal voluntariamente. Los que actúan mal es por ignorancia del bien (Intelectualismo moral: el conocimiento teórico del bien implica su práctica)
Al ser el alma racional, la libertad humana se alcanza liberándose de lo irracional (pasiones, instintos del cuerpo). Así el ser humano consigue el autodominio (lo externo no perturba su alma y su conducta virtuosa)

El método socrático para desarrollar el autodominio consiste en la mayéutica y la dialéctica. La mayéutica es la técnica de la partera (Fenareta, su madre, lo era): mediante el diálogo se “alumbran” ideas en la mente del otro. Para llegar a esto se emplea el diálogo (intercambio de preguntas y respuestas entre dos o más personas) con la finalidad de alcanzar la verdad (mediante una definición). La ironía (fingir que no se sabe) es una estrategia para la refutación, ya que dando confianza al interlocutor le obliga exponer sus argumentos, que Sócrates demuestra ser falsos (el interlocutor se contradice)

Uno de los fenómenos más extraños de Sócrates era una “voz interior” (δαίμων) que le alertaba para que no hiciera ciertas cosas, pero nunca le decía lo que tenía que hacer.
Sócrates pasa a la historia por su integridad moral al ser fiel a sus principios racionales aceptando la condena a muerte que un tribunal de Atenas (recién restaurada la democracia tras la derrota de Esparta) dictó por introducir nuevos dioses y corromper a la juventud (La “Apología de Sócrates” de Platón nos informa de ello). Tras charlar con sus discípulos se despidió de ellos y bebió la cicuta. 

La imagen de Sócrates como “mártir de la razón” y fundador de la ética se debe a Platón (427-347 aC), su discípulo más famoso, que dio forma escrita a los pensamientos del maestro. El autor de comedias Aristófanes (444-385 aC) presentó a Sócrates como un ridículo sofista (“Las nubes”), y en el siglo XIX Friedrich Nietzsche (1844-1900) ve en Sócrates la decadencia del espíritu trágico griego y un enemigo de la vida

Jacques-Louis David (1748-1825): "La mort de Socrate" (1787)
Metropolitan Museum of Art. New York
"La muerte de Sócrates" representa el momento en que el filósofo ateniense toma la cicuta en la cárcel donde está preso tras su condena. Continúa la conversación con sus discípulos hasta el final.
Es una pintura al óleo del periodo neoclásico, y describe una escena que Platón narra en su diálogo "Fedón"

Platón (Πλάτων) (Atenas 428 aC - Atenas 348 aC)
Busto en mármol. Siglo IV aC
Musei Capitolini. Piazza del Campidoglio, 1. Roma

El más grande de los filósofos. El primero del que conservamos todos sus escritos, llamados Diálogos, como homenaje a su maestro Sócrates. En estos Diálogos, Platón reflexiona, en forma de conversación utilizando el personaje de Sócrates, sobre temas como la realidad (dualismo ontológicouna realidad perfecta ideal, y otra imperfecta material que copia esas Ideas), el conocimiento (dualismo epistemológicoun conocimiento racional, verdadero, y otro sensible, probable o falso), el ser humano (dualismo antropológico: un alma racional inmortal, y un cuerpo mortal), el amor (un impulso que busca la Belleza, el Bien y la sabiduría), la ética (la justicia es la virtud más importante, y es una armonía de otras virtudes), la política (un estado justo tiene que ser dirigido por los que conocen la justicia que son los filósofos)

En el mito (alegoría de la caverna) de su libro "República" (Πολιτεία), Platón describe a unos prisioneros dentro de una cueva que nunca han visto más que sombras, creyendo que son la verdadera realidad. Uno de los prisioneros sale (proceso de la educaciónpaso de la ignorancia/sombras/apariencias sensibles al saber/luz/Ideas racionales) y contempla la verdadera realidad, de la que antes solo había visto copias.

Platón creó la Academia en Atenas (precedente de la Universidad) donde enseñaba matemáticas y filosofía. Allí estudió veinte años un joven macedonio llamado Aristóteles, que luego rechazó la filosofía del maestro y creó su propia escuela, el Liceo, también en Atenas.

Platón es el filósofo que más ha influido en la historia. Un pensamiento en que la realidad verdadera son los Modelos (Ideas o Formas) con los que se comparan las cosas materiales. Por eso las matemáticas y la filosofía (dialéctica) -ciencia de las definiciones y las clasificaciones- son los únicos conocimientos verdaderos, porque estudian lo perfecto, lo eterno, lo permanente

El alemán Friedrich Wilhelm Nietzsche (Röcken, 1844 - Weimar, 1900) fue un pensador solitario, como Descartes, a diferencia de Sócrates. Pero la soledad de Nietzsche fue la del caminar por las montañas -su amor a la naturaleza típico del romanticismo- y la incomprensión de sus contemporáneos. Nietzsche no era un filósofo profesional a la manera de Kant, Hegel, o, incluso, Schopenhauer. Claro que enseñó en la universidad, pero fue profesor de filología clásica. Su acercamiento a la filosofía vino a través del pesimismo schopenhaueriano. Con la huella de la música de Richard Wagner (1813-1883) -que fue su ídolo y protector temprano- y la filosofía de Arthur Schopenhauer (1788-1860) escribió su primer libro: "El nacimiento de la tragedia", en el que lanzó una idea atrevida y provocadora: los griegos no eran solo armonía y racionalidad (dimensión apolínea). En ellos estaba presente una dimensión irracional, instintiva, que llamó "dionisiaca". Fue en la tragedia -lo más parecido al "drama musical" wagneriano- donde sintetizaron los helenos esos dos elementos. Pero por culpa de Sócrates y su influencia, uno de los trágicos atenienses de mayor éxito -Eurípides- eliminó la dimensión dionisiaca y liquidó la conexión del arte griego con las fuerzas primitivas de la vida. Impuso un ideal de claridad y racionalidad socráticas. En ese momento comenzó la decadencia de la cultura griega, justo antes de Platón y Aristóteles. Razón y Vida quedaron enfrentadas. Sócrates despreció la vida -lo dionisiaco en su raíz incontrolable- y propuso un nuevo ideal: "razón=virtud=felicidad". El ser humano ya no podría alcanzar la felicidad con la embriaguez, la pasión, la fuerza, la naturaleza, la vida. Habría que someterse a algo llamado "virtud" que solo estaba al alcance de la razón. Y cuando Sócrates tuvo que elegir prefirió la muerte -aceptando la condena del tribunal que él mismo aseguró que era injusta- a escapar o al exilio. Esa integridad o ese fanatismo de la verdad convertido en cuidado del alma, es para Nietzsche una muestra del odio a la vida de unos hombres que ya eran "decadentes", los filósofos.

Nietzsche sitúa a Platón como el precedente directo del cristianismo inventando un "ultramundo" metafísico donde estaban la verdadera realidad y el bien. Ese "mundo inteligible" platónico está lleno de desprecio a la vida. El que afirmara que la filosofía era una preparación para la muerte lo dice todo. El cristianismo hereda ese "ultramundo". Lo peor del cristianismo no es la creencia en Dios, sino el código moral que deriva de éste. Este código moral -mandamientos- impone la debilidad, la resignación, la compasión, exalta al pobre frente al rico, y al enfermo frente al sano. Promete una vida eterna para consolar de la miseria de esta vida a la que desprecia y reprime

Muñeco de peluche de Friedrich Nietzsche
Unemployed Philosophers Guild Friedrich Nietzsche Little Thinker - 11" Plush Doll for Kids and Adults.
Compré este gracioso muñeco en Amazon el 20 de febrero de 2019, y lo llevé a clase de 2º de Bachillerato en 2019 y 2021, como "invitado" tras la explicación del tema. Las reacciones cubrieron todo el "espectro": estudiantes encantados, desinteresados o hastiados con las "tretas" del profesor por captar su atención

Dilema: ¿Por qué mucha gente elige el pan y no la llave?
Sin duda, la llave (Filosofía como Pensamiento Libre) nos saca de la prisión. ¿Qué prisión? ¿La ignorancia, la opresión, el miedo, la injusticia, la mentira, la maldad?

Quiero recordar la frase con la que comienza el libro del escritor italiano Cesare Pavese (1908-1950), "Il mestiere di vivere: Diario 1935-1950" (El oficio de vivir: Diario 1935-1950)

"L’unica gioia al mondo è cominciare. È bello vivere perché vivere è cominciare, sempre, ad ogni istante. Quando manca questo senso –prigione, malattia, abitudine, stupidità–, si vorrebbe morire"

(La única alegría en el mundo es comenzar. Es hermoso vivir porque vivir es comenzar, siempre, a cada instante. Cuando falta esa sensación -prisión, enfermedad, hábito, estupidez- uno quisiera morir

 Presentamos aquí un comentario que titulé "Sócrates: caso abierto. Entre Platón ("Apología", "Critón") y Nietzsche ("Crepúsculo de los ídolos")" realizado por la alumna Alba Fernández Candela en la asignatura de Filosofía de 1º de Bachillerato en el año 2007. La calificación obtenida fue 10 sobre 10.

 La figura de Sócrates no ha hecho sino engrandecerse con el paso de los siglos. Debo confesar que antes no me resultaba simpático. El Sócrates de Platón, el de los primeros diálogos, con su "falsa humildad" irónica, que oculta una insultante "arrogancia" puede parecer insolente. Eso mismo debió sentir el Tribunal ateniense que le juzgó al escuchar su "contrapropuesta" de ser mantenido a costa del Estado, tras ser condenado al destierro. Sin embargo, conforme el siglo XXI ha ido adentrándose en el túnel de la irracionalidad y la manipulación mediática, la actitud socrática de "rebeldía" frente a las costumbres y los prejuicios, de "interrogar" "racionalmente", sin fin, "dialécticamente", para "descubrir" la "ignorancia" de los que se presentan a sí mismos como "sabios", todo ello, ahora es más "radical" y "actual" que nunca. Sócrates con su "duda interrogativa" e "irónica" es el "padre" de toda la filosofía, de todo el pensamiento racional. 

 El análisis de Alba Fernández Candela -hoy doctora en medicina- es claro, distinto, conciso, y hace gala del uso de las "citas" de las obras. Sócrates podía ser "inocente" -justo- a los ojos de su discípulo Platón, por todo lo expuesto arriba, pero también podía ser "culpable" como "enemigo de la vida" a los ojos de Nietzsche. El Sócrates de Nietzsche es el "iniciador" de la "decadencia occidental" porque puso la razón por encima -y en contra- de la vida, del instinto, de la salud y la voluntad de poder. Y, sin embargo, la función "crítica" del pensamiento -"tábano"- alcanza en el Maestro ateniense una fuerza liberadora que es tan necesaria como escasa en estos tiemposPor eso Alba finaliza su estudio con estas palabras:

"Su manera de poner en práctica el método importunaba a muchas personas y él se comparaba con un tábano <<que se posa sobre el caballo remolón, pero noble y fuerte y que necesita que un aguijón le encoragine>> (Apología 30e). Pero a pesar de lo molesto que pudiera ser él consideraba que esa era su función y que debía seguir haciéndola a pesar de lo que pudiera pensar la gente"












Sócrates: caso abierto. ¿Inocente o Culpable? Entre Platón ("Apología", "Critón") y Nietzsche ("Crepúsculo de los ídolos")
Comentario
Alumna: Alba Fernández Candela
Asignatura: Filosofía
1º Bachillerato C
IES V. Kent. Elx. 2007-2008
Profesor: Francisco Huertas Hernández
Páginas 1-12

1 comentario:

Anónimo dijo...

Felicidades a Alba por su trabajo. Creéis que todavía se hacen ejercicios así? Esto de la educación está muy mal. Ahora pasan de curso sin aprobar, por la cara. Es una vergüenza