Mijail Bulgakov: "Морфий" (1927).
Diario de un doctor morfinómano. Obra maestra del relato breve.
Francisco Huertas Hernández
Михаил Афанасьевич Булгаков (1891-1940): "Морфий" (1927)
Mijail Afanasyevich Bulgákov (1891-1940): "Morfina" (1927)
La introspección es un movimiento de conciencia de ensimismamiento reflexivo, y es más profunda cuando realiza su autoobservación sobre el efecto que producen en el alma causas externas. Las drogas -veneno balsámico- han potenciado la capacidad del hombre de conocerse en sus más extremos rincones, y la literatura y la filosofía han aportado la herramienta para captar y expresar esos dulces tormentos en los que la lucidez, el delirio, el placer, el dolor, la alegría y el espanto han bailado un vals convertido en trepak vertiginoso o danza de Ménades enloquecidas.
Mijail Afanasyevich Bulgákov (1891-1940), el gran escritor ruso, se valió de su experiencia dolorosa como adicto a la morfina, tras infectarse de difteria en la aldea de Nikolskoye, trabajando de médico. Con la ayuda de su esposa, Tatyana Lappa, hacia 1919 consiguió superar su adicción. Este episodio fue descubierto en 1977 en el libro "Неизданный Булгаков. Тексты и материалы" (Bulgakov inédito. Textos y Materiales). La dependencia de la morfina del joven médico rural coincide con la Revolución Rusa. El relato "Morfina" publicado originalmente en la revista "Медицинский работник" (Trabajador médico) en diciembre de 1927 fue la última obra que se editó en vida del autor.
Un genio de la literatura se diferencia de un escritor mediano en la fuerza y verdad de su contenido y en la perfección formal de su palabra. Bulgákov no escribe tonterías, no escribe palabras innecesarias. No hay anécdotas baladíes ni retórica descriptiva en su escritura. En "Morfina", que no forma parte del libro "Записки юного врача" (Notas de un joven médico), la depuración del lenguaje tiende al silencio, en paralelo a la descomposición física y mental del protagonista. El desdoblamiento en dos médicos de la narración, va más allá de la dupla emisor (autor del relato) y receptor (lector del relato), y representa dos estados del mismo Mijail Afanasyevich en relación con la morfina.
Los protagonistas son dos médicos, que, en realidad, es la misma persona en dos fases de su vida: Mijail Bulgákov adicto a la morfina se transforma en la novela en el joven doctor Serguéi Vasílyevich Polyakov, que decide enviar su Diario al doctor Vladímir Mijáilovich Bomgard que le antecedió en el puesto de médico rural, y sería el mismo Bulgákov ya curado de su adicción. La literatura exige un espíritu trágico, y el Polyakov narrativo no se salvará, el lector no sería feliz si tal cosa ocurriera.
La primera frase del relato homenajea a uno de los autores sagrados de Bulgákov, Lyev Tolstoi en "Anna Karenina":
"Desde siempre las personas inteligentes han observado que la felicidad es como la salud: cuando la tienes, no lo sabes. Pero, cuando pasan los años, cómo recuerdas la felicidad, ¡ah, como la recuerdas!
En lo que a mí respecta, sólo ahora me doy cuenta de que en el invierno de 1917 fui feliz. ¡Un año inolvidable, febril, cargado de tormentas de nieve!"
(Давно уже отмечено умными людьми, что счастье как здоровье: когда оно налицо, его не замечаешь. Но когда пройдут годы, — как вспоминаешь о счастье, о, как вспоминаешь!
Что касается меня, то я, как выяснилось это теперь, был счастлив в 1917 году, зимой. Незабываемый, вьюжный, стремительный год)
La querencia bulgakoviana por las tormentas de nieve es un elemento crucial de estas narraciones médicas. Y es uno de los símbolos del alma rusa a través del paisaje. El narrador en primera persona es el doctor Bomgard, que acaba de ascender, ocupando un puesto en una ciudad con luz eléctrica, y otras comodidades que le recuerdan a su querida Moscú donde estudió Medicina. Un nuevo hospital con plantas de cirugía, medicina de cabecera, infecciosos y obstetricia, con un médico jefe, cuatro internos (entre ellos, el narrador), sanitarios, comadronas, enfermeras, farmacia y laboratorio... con un microscopio Zeiss. ¡Qué alivio sentía el joven Bomgard!:
"Mi alma se había librado de una pesada carga. Ya no llevaba sobre mis espaldas la terrible responsabilidad por todo lo que pasaba en el mundo. No era culpable de una hernia estangulada, no me volvía loco cuando llegaba un trineo trayendo a una parturienta con el niño atravesado, las pleuritis purulentas que necesitaban ser operadas inmediatamente ya no eran asunto mío... Por primera vez me sentía un ser humano, cuya responsabilidad tenía unos límites bien precisos"
(Тяжкое бремя соскользнуло с моей души. Я больше не нес на себе роковой ответственности за все, что бы ни случилось на свете. Я не был виноват в ущемленной грыже и не вздрагивал, когда приезжали сани и привозили женщину с поперечным положением, меня не касались гнойные плевриты, требовавшие операции. Я почувствовал себя впервые человеком, объем ответственности которого ограничен какими-то рамками)
Éste era Bomgard, leyendo por la noche textos sobre la escarlatina y la difteria, y a Fenimore Cooper... fue pasando el tiempo... un mes... dos... tres... y en 1918, ya adaptado a su destino laboral, comenzó a preguntarse quién estaría ocupando su antiguo puesto en la aldea... cuando un día recibió una extraña carta escrita por detrás de un formulario largo y arrugado, con el sello azul de su distrito, del antiguo hospital... en el reverso, con caligrafía insegura, le escribía el nuevo médico que le sustituía, conocido de tiempos de la universidad, enfermo y pidiendo ayuda. Le imploraba que le visitara pasa intentar salvarse y guardara silencio sobre el contenido de la carta.
(«11 февраля 1918 года.
Милый коллега!
Извините, что пишу на клочке. Нет под руками бумаги. Я очень тяжко и нехорошо заболел. Помочь мне некому, да я и не хочу искать помощи ни у кого, кроме Вас.
Второй месяц я сижу в бывшем Вашем участке, знаю, что Вы в городе и сравнительно недалеко от меня.
Во имя нашей дружбы и университетских лет прошу Вас приехать ко мне поскорее. Хоть на день. Хоть на час. И если Вы скажете, что я безнадежен, я вам поверю… А может быть, можно спастись?.. Да, может быть, еще можно спастись?.. Надежда блеснет для меня? Никому, прошу Вас, не сообщайте о содержании этого письма»)
Bomgard obtuvo permiso para realizar el viaje a la aldea, pero ya era tarde: una noche trajeron al hospital al médico de la aldea, el de la carta... ¡se había pegado un tiro! ¡Polyakov! Murió en la mesa de operaciones... pero le dejó su Diario a Bomgard con una hoja de papel en un sobre:
"Querido compañero:
He decidido no esperar. He renunciado a curarme. No hay esperanza. Y no quiero seguir sufriendo. Ya basta. Quiero prevenir a otros para que tengan cuidado con los cristales blancos que se disuelven en veinticinco partes de agua. He confiado demasiado en ellos y me han destruido. Le entrego mi Diario. Usted siempre me ha parecido una persona ávida de saber y aficionada a los documentos humanos. Si le interesa, lea la historia de mi enfermedad.
Adiós.
Suyo,
S. Polyakov"
Y había un añadido en grandes caracteres:
"Que no se culpe a nadie de mi muerte.
Doctor Serguéi Polyakov
13 de febrero de 1918""
(«Милый товарищ!
Я не буду Вас дожидаться. Я раздумал лечиться. Это безнадежно. И мучиться я тоже больше не хочу. Я достаточно попробовал. Других предостерегаю. Будьте осторожны с белыми, растворимыми в 25 частях воды кристаллами. Я слишком им доверился, и они меня погубили. Мой дневник вам дарю. Вы всегда казались мне человеком пытливым и любителем человеческих документов. Если интересует вас, прочтите историю моей болезни.
Прощайте. Ваш С. Поляков».
Приписка крупными буквами:
«В смерти моей прошу никого не винить.
Лекарь Сергей Поляков.
13 февраля 1918 года»)
La carta de un suicida. Palabras precisas. Frases breves y temblorosa caligrafía. Bomgard comienza a leer el Diario: en enero el joven Polyakov está contento, y menciona a sus amigos Ivanov y Bomgard, del que ha sabido que está en Gorelevo. Las anotaciones del Diario son de extensión variable. A veces sólo una ventisca de nieve, una puesta de sol luminosa, las dosis de un compuesto médico. Y una mujer: una cantante de ópera, que le dejó. Herido en el alma, como todos los que hemos sido abandonados, y más con la música de "Aida" de Verdi. Ni matarla ni morir, sin esperanza. Y Anna Kirílovna, la enfermera-comadrona, casada, aunque su marido, soldado, está preso en Alemania.
El 15 de febrero: "anoche ocurrió algo curioso. Iba ya a acostarme cuando de pronto me empezó a doler el estómago. ¡Pero qué dolor! Un sudor frío me bañó la frente. Debo señalar que nuestra medicina es una ciencia inexacta. ¿Por qué una persona que no padece ninguna enfermedad gástrica o intestinal (apendicitis, por ejemplo), cuyo hígado y riñones están en un estado óptimo, cuyo intestino funciona de una manera completamente normal, puede padecer de noche dolores tan agudos que le hacen revolcarse en la cama?
Gimiendo, logré llegar hasta la cocina, donde duerme la cocinera con su marido, Vlas. Envié a Vlas a buscar a Anna Kirílovna. Ella vino en plena noche y tuvo que ponerme una inyección de morfina. Dijo que estaba completamente verde. ¿Por qué sería?"
(15 февраля.
Вчера ночью интересная вещь произошла. Я собирался ложиться спать, как вдруг у меня сделались боли в области желудка. Но какие! Холодный пот выступил у меня на лбу.
Все-таки медицина — сомнительная наука, должен заметить.
Отчего у человека, у которого нет абсолютно никакого заболевания желудка или кишечника (аппенд., напр.), у которого прекрасная печень и почки, у которого кишечник функционирует совершенно нормально, могут ночью сделаться такие боли, что он станет кататься по постели?
Со стоном добрался до кухни, где ночует кухарка с мужем своим, Власом. Власа отправил к Анне Кирилловне. Та ночью пришла ко мне и вынуждена была впрыснуть мне морфий. Говорит, что я был совершенно зеленый. Отчего?)
Morfina para calmar un dolor desconocido. Siguen las alabanzas en el Diario para el benefactor de la humanidad que extrajo la morfina de las amapolas. La llegada de la morfina al cuerpo del doctor Polyakov no sólo alivia el dolor sino que le permite experimentar con los efectos de un medicamento, paliativo, pero medicamento. Puede dormir bien. La relación con Anna Kirílovna va estrechándose. Ella le ve cada día más alegre, aunque él es una persona muy triste, sí, pero era alegre antes del drama familiar. Anna Kirílovna es la depositaria del secreto de la morfina. Su enfermera, su cuidadora. Las dosis van aumentando. El 25 de febrero ya comenta Polyakov que Anna está preocupada. El 1 de marzo Anna Kirílovna ya es su "esposa secreta" (Анна К. стала моей тайной женой). En las anotaciones de este día se describen con detalle las sensaciones de la morfina: un roce, una onda fría, el "punto más alto de la expresión de la fuerza espiritual del hombre" (Это высшая точка проявления духовной силы человека). El espíritu debe elevarse por encima del dolor, anularlo. La morfina deja libre al espíritu para crear. Y, sin embargo, "Anna K. tiene mucho miedo. La tranquilicé diciéndole que desde niño tengo una extraordinaria fuerza de voluntad" (Анна К. боится. Успокоил ее, сказав, что я с детства отличался громаднейшей силой воли).
El 2 de marzo irrumpe la historia desde la lejanía:
"Hay rumores de que algo gigantesco ha ocurrido. Al parecer han derrocado a Nicolás II.
Me acuesto muy temprano. A eso de las nueve. Duermo dulcemente"
(2 марта.
Слухи о чем-то грандиозном. Будто бы свергли Николая!!.
Я ложусь спать очень рано. Часов в девять. И сплю сладко).
El 10 de marzo leemos: "Allí se está produciendo una revolución. Los días se han vuelto más largos y los atardeceres, dicen, más azules.
Nunca había tenido sueños como los que ahora me asaltan al amanecer. Son sueños dobles.
Además, diría que el sueño principal es de cristal. Es transparente"
(10 марта.
Там происходит революция. День стал длиннее, а сумерки как будто чуть голубоватее.
Таких снов на рассвете я еще никогда не видел. Это двойные сны.
Причем основной из них, я бы сказал, стеклянный. Он прозрачен).
En su sueño escucha "Aida", un sueño... ¡en el que se escucha música! "Un sueño normal no tiene sonido, y en cambio en mi sueño la música que se oye parece celestial. Y lo más importante, yo puedo, a voluntad, conseguir que la música suene con mayor o menor intensidad. Recuerdo que en "Guerra y Paz" se describe como Petia Rostov, en duermevela, tuvo la misma sensación. ¡Tolstói es extraordinario!"
(Одним словом, в нормальном сне музыка беззвучна… (в нормальном? Еще вопрос, какой сон нормальнее! Впрочем, шучу…) беззвучна, а в моем сне она слышна совершенно небесно. И, главное, что я по своей воле могу усилить или ослабить музыку. Помнится, в «войне и мире» описано, как Петя Ростов в полусне переживал такое же состояние. Лев Толстой — замечательный писатель!).
En el cerebro medio dormido y anestesiado de Polyakov, un hombre culto, sensible, confluyen los sones operísticos unidos a su gran amor -la soprano ingrata-, Anna Kirílovna -bondadosa, cuidadora-, recuerdos del Teatro Bolshói de Moscú, las transparencias del cristal del sueño...
El 19 de marzo Anna Kirílovna se niega a prepararle más soluciones. Esto hace descubrir una tendencia a la ira en Polyakov. El joven médico veinteañero acude a buscar a la amante para que le dé las llaves de la farmacia, ella se niega, él se las arrebata, y ciego de rabia y de abstinencia, fue a la farmacia, adonde le siguió la bondadosa Anna K. que acabó preparándole su dosis, quien confiesa, no obstante, que sabe que Serguéi es un hombre acabado.
El 8 de abril Polyakov ya comprende que esto es un martirio. A lo largo de abril hay un intento de sustituir la morfina por la cocaína, y advierte a los hipotéticos lectores de su Diario que no lo hagan.
El 6 de mayo escribe que esto no es un Diario sino una Historia Clínica. El doctor Polyakov sigue trabajando y operando sin que nadie haya advertido nada. Lee sobre los síntomas de la abstinencia, sobre las alucinaciones, que dice no haber experimentado.
En noviembre se cuenta de manera velada su fuga de una clínica de desintoxicación en Moscú. El doctor que le atiende le advierte de su deterioro inevitable si abandona el tratamiento y la irresponsabilidad de seguir trabajando como médico. Regresa a la aldea.
"¿Tan avanzada parece mi degeneración? Presento como testimonio estas notas. Son fragmentarias, ¡pero yo no soy escritor! ¿Acaso deliro? Me parece que razono de manera perfectamente clara.
El morfinómano siente una felicidad de la que nadie puede privarle: la capacidad de vivir en el más completo aislamiento. Aislamiento significa pensamientos profundos y elevados, contemplación, serenidad, sabiduría..."
(Да и велик ли распад? Привожу в свидетели эти записи. Они отрывочны, но ведь я же не писатель! Разве в них какие-нибудь безумные мысли? По-моему, я рассуждаю совершенно здраво.
У морфиниста есть одно счастье, которое у него никто не может отнять, — способность проводить жизнь в полном одиночестве. А одиночество — это важные, значительные мысли, это созерцание, спокойствие, мудрость…).
"¿Tan avanzada parece mi degeneración? Presento como testimonio estas notas. Son fragmentarias, ¡pero yo no soy escritor! ¿Acaso deliro? Me parece que razono de manera perfectamente clara.
El morfinómano siente una felicidad de la que nadie puede privarle: la capacidad de vivir en el más completo aislamiento. Aislamiento significa pensamientos profundos y elevados, contemplación, serenidad, sabiduría..."
(Да и велик ли распад? Привожу в свидетели эти записи. Они отрывочны, но ведь я же не писатель! Разве в них какие-нибудь безумные мысли? По-моему, я рассуждаю совершенно здраво.
У морфиниста есть одно счастье, которое у него никто не может отнять, — способность проводить жизнь в полном одиночестве. А одиночество — это важные, значительные мысли, это созерцание, спокойствие, мудрость…).
Noviembre sigue con la degeneración creciente de la personalidad de Polyakov, de la que es consciente en el acto de la escritura introspectiva. El 19 de noviembre ya está vomitando. Esto es terrible
(19-го ноября.
Рвота. Это плохо)
Anna amenaza con ahorcarse si Polyakov no va a la ciudad, el enfermero ya lo sabe. Sus manos tiemblan. Una extraña confesión: Polyakov ha superado el dolor del abandono de su esposa, su Amneris, gracias a la morfina.
(Анна (печально). — Что тебя может вернуть к жизни? Может быть, эта твоя Амнерис — жена?
Я. — О нет. Успокойся. Спасибо морфию, он меня избавил от нее. Вместо нее — морфий)
El 27 de diciembre se informa de que Bomgard ha dejado su puesto en el distrito de Gorelovo y lo ocupará Polyakov. Anna se quedará aquí. Irá a visitarlo. Aunque son treinta verstas. Haciendo caso a Anna irá a Moscú a ver al profesor y tomará medicamentos durante un mes en el sanatorio.
"Adios, Levkovo. Hasta la vista, Anna"
(Давно я не брал в руки тетрадь. Я закутан, лошади ждут. Бомгард уехал с Гореловского участка, и меня послали заменить его. На мой участок — женщина-врач.
Анна — здесь… Будет приезжать ко мне…
Хоть 30 верст.
Решили твердо, что с 1 января я возьму отпуск на один месяц по болезни — и к профессору в Москву. Опять я дам подписку, и месяц я буду страдать у него в лечебнице нечеловеческой мукой.
Прощай, Левково. Анна, до свиданья)
(19-го ноября.
Рвота. Это плохо)
Anna amenaza con ahorcarse si Polyakov no va a la ciudad, el enfermero ya lo sabe. Sus manos tiemblan. Una extraña confesión: Polyakov ha superado el dolor del abandono de su esposa, su Amneris, gracias a la morfina.
(Анна (печально). — Что тебя может вернуть к жизни? Может быть, эта твоя Амнерис — жена?
Я. — О нет. Успокойся. Спасибо морфию, он меня избавил от нее. Вместо нее — морфий)
El 27 de diciembre se informa de que Bomgard ha dejado su puesto en el distrito de Gorelovo y lo ocupará Polyakov. Anna se quedará aquí. Irá a visitarlo. Aunque son treinta verstas. Haciendo caso a Anna irá a Moscú a ver al profesor y tomará medicamentos durante un mes en el sanatorio.
"Adios, Levkovo. Hasta la vista, Anna"
(Давно я не брал в руки тетрадь. Я закутан, лошади ждут. Бомгард уехал с Гореловского участка, и меня послали заменить его. На мой участок — женщина-врач.
Анна — здесь… Будет приезжать ко мне…
Хоть 30 верст.
Решили твердо, что с 1 января я возьму отпуск на один месяц по болезни — и к профессору в Москву. Опять я дам подписку, и месяц я буду страдать у него в лечебнице нечеловеческой мукой.
Прощай, Левково. Анна, до свиданья)
A partir de enero de 1918 las anotaciones son más escasas. No es capaz de ir a Moscú y dejar su "dios cristalino y soluble" (Я не поехал. Не могу расстаться с моим кристаллическим растворимым божком). Sigue vomitando. Jeringuillas, ¡al 4 por ciento! Serguéi Vasílyevich Polyakov tiene que abstenerse de morfina los días de operación. Anna sigue visitando a Polyakov en Gorelovo y ayudándole en las dosis, aunque intenta engañarlo disminuyendo la cantidad.
"Mi aspecto externo es delgado y pálido como la cera. Me he dado un baño y luego me he pesado en una balanza del hospital. El año pasado pesaba 4 puds; ahora peso 3 puds 15 libras. Me he asustado al mirar la flecha de la balanza, pero después se me ha olvidado" (Внешний вид: худ, бледен восковой бледностью.
Брал ванну и при этом взвесился на больничных весах. В прошлом году я весил 4 пуда, теперь 3 пуда 15 фунтов. Испугался, взглянув на стрелку, потом это прошло) (Observación: he traducido las medidas tradicionales rusas vigentes hasta 1924 y no las del sistema métrico decimal, tal como aparece en el texto original de Bulgákov. S. Casanova y Adriá Edo, traductores al español en Ediciones Barataria, lo sustituyen por 65 y 55 Kgs)
El 18 de enero se anota una alucinación: ciertas personas pálidas en una cortina. Se ve obligado a justificar ante los demás sus conductas extrañas. La disgregación psíquica aún no es visible en la escritura pero sí en los comportamientos.
El 1 de febrero llega Anna, amarillenta y enferma. El adicto Polyakov la deja: "He acabado con ella. Yo. Sí, sobre mi conciencia pesa un gran pecado" (Анна приехала. Она желта, больна.
Доконал я ее. Доконал. Да, на моей совести большой грех)
El 3 de febrero hay sólo un fragmento estremecedor:
"Será una montaña de nieve. Helada e interminable, como aquella desde la cual, en los cuentos de mi infancia, se llevaban en trineo al mítico Kai. Es mi último vuelo por esa montaña y sé lo que me espera abajo. Ay, Anna, pronto sufrirás enormemente, si me has amado..."
(Итак: горка. Ледяная и бесконечная, как та, с которой в детстве сказочного Кая уносили сани. Последний мой полет по этой горке, и я знаю, что ждет меня внизу. Ах, Анна, большое горе будет вскоре, если ты любила меня…) (Nota sobre la traducción: горка es tobogán, no montaña de nieve) La irrupción de la infancia en las cercanías de la muerte es el cierre circular de la vida. El que va a morir recupera sus recuerdos infantiles, esa época en que la vida se abre ante el niño en su horizonte inacabable. La morfina arrastra impetuosamente al doctor hacia un horizonte de salida, un ocaso anticipado, helado, vacío. Polyakov ya sabe que va a morir, y, quizás, quiera morir lo menos indignamente posible.
El 11 de febrero escribe que ha decidido avisar a Bomgard: "¿Por qué justamente a él? Porque no es psiquiatra, porque es joven y porque fue compañero de universidad. Es un hombre sano y fuerte pero al mismo tiempo es dulce, según creo. Lo recuerdo. Quizá sea... Será compasivo. Podrá hacer algo. Que me lleve a Moscú. No puedo ir hasta él. Me han concedido el permiso. Estoy acostado. No voy al hospital"
(11 февраля.
Я решил так. Обращусь к Бомгарду. Почему именно к нему? Потому что он не психиатр, потому что молод и товарищ по университету. Он здоров, силен, но мягок, если я прав. Помню его. Быть может, он над… я в нем найду участливость. Он что-нибудь придумает. Пусть отвезет меня в Москву. Я не могу к нему ехать. Отпуск я получил уже. Лежу. В больницу не хожу).
"La nota a Bomgard ha partido.
¡Humanos! ¿Alguien puede ayudarme?
¡Humanos! ¿Alguien puede ayudarme?
He comenzado a lanzar exclamaciones patéticas. Si alguien leyera esto, pensaría que son falsas. Pero nadie lo leerá.
... Esta noche he llorado al recordar esto"
(Записка Бомгарду отправлена.
Люди! Кто-нибудь поможет мне?
Патетически я стал восклицать. И если кто-нибудь прочел бы это, подумал — фальшь. Но никто не прочтет
...Плакал ночью, вспомнив это).
La noche del 12 de febrero Polyakov seguía llorando...
"Año 1918. Amanecer del 13 de febrero, Gorelovo.
Puedo felicitarme. ¡No me he inyectado en catorce horas! ¡Catorce! Una cifra inimaginable. El amanecer es confuso y neblinoso. ¿Estaré completamente sano dentro de un rato?
Me debo una reflexión madura. No necesito a Bomgard. No necesito a nadie. Sería vergonzoso prolongar mi vida, aunque sólo fuera un minuto. Una vida así no se puede prolongar. Tengo la medicina al alcance de la mano. ¿Cómo no se me había ocurrido antes?..."
(1918 года 13 февраля на рассвете в Гореловке.
Могу себя поздравить: я без укола уже четырнадцать часов! 14! Это немыслимая цифра. Светает мутно и беловато. Сейчас я буду совсем здоров?
По зрелому размышлению. Бомгард не нужен мне и не нужен никто. Позорно было бы хоть минуту длить свою жизнь. Такую — нет, нельзя. Лекарство у меня под рукой.
Как я раньше не догадался?...).
El doctor Vladímir Mijáilovich Bomgard terminó de leer este abrasador Diario de un morfinómano de Serguéi Vasílyevich Polyakov el amanecer del 14 de febrero de 1918, en una lejana ciudad provinciana. Diez años después, disipadas la piedad y el terror, y releído, sigue resultando al narrador, a Bomgard (Bulgákov), útil. Quizás porque sirva de advertencia a futuros adictos. Anna Kirílovna murió en 1922 de tifus. Amneris se marchó al extranjero.
"¿Puedo publicar ya este diario?
Puedo. Y así lo hago.
Doctor Bomgard"
(Могу ли я печатать записки, подаренные мне?
Могу. Печатаю. Доктор Бомгард)
Ha leído usted un resumen hecho por Francisco Huertas Hernández de un relato de Mijail Afanasyevich Bulgakov que narra un recuerdo de un médico, el doctor Vladímir Mijáilovich Bomgard, que lee un Diario de otro médico, Serguéi Vasílyevich Polyakov.
Esta narrativa enmarcada es un juego de espejos narrativos como cristales que reflejan y se clavan en el alma. Una urgencia anímica, un grito de auxilio. El Diario de Polyakov ejemplifica esa dimensión expresiva y emotiva del lenguaje. La función representativa correspondiente a los hechos y personas tiene la claridad de la escritura bulgakoviana. Polyakov ilustra con cantidades exactas de compuestos químicos las dosis crecientes de la droga analgésica. Pero predomina una función expresiva, en la que el espíritu herido del joven doctor crece en la iluminación de la calma que la morfina ofrece, en un riquísimo registro de estados de ánimo y reflexiones. La función apelativa, es decir, la moralina de los autores que pretenden influir ideológicamente en los receptores es mínima. Bulgákov está lejos de la literatura maniquea de condena de las drogas.
"Морфий" es un libro tremendo, y, no obstante, lacónico. El hombre muere cuando vive, pero sólo quienes se matan para no morir de dolor o de aburrimiento alcanzan la visión profunda de una vida, que, vivida sin conciencia de la muerte, ni es vida ni es muerte: es vacío. No necesitamos acudir a esas experiencias fundantes y peligrosas, basta con leer a los clásicos de la literatura. Y Mijail Bulgákov es uno de los más grandes.
Francisco Huertas Hernández
14 de septiembre de 2025
4 comentarios:
Sensacional
Aplausos para esta reseña de una obra infaltable en cualquier biblioteca
Gracias lector por su apoyo
Leer, leer, leer, y salir del horror de la vida a través de la belleza y la verdad del arte.
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