Carta de un profesor cinéfilo
(O de cómo una página de la Memoria Didáctica llegó a volar por un blog de cine)
Francisco Huertas Hernández
Profesor de Filosofía
IES Doctor Balmis
Alicante (España)
El autor en la Cinémathèque Française
51 Rue de Bercy
75012 Paris
Juin 2015
¿Qué significa esto? Que he sustituido en casi todas las materias los exámenes por la realización de comentarios cinematográficos, a partir de películas elegidas por mí, que se adaptaran a los temas explicados en clase.
"Blackboard Jungle" (1955). Richard Brooks
"Semilla de maldad", fue su título en español. La primera película sobre violencia escolar nos conmocionó cuando la vimos en televisión. Esta escena mostraba al inasequible profesor Richard Dadier (Glenn Ford) intentando enseñar a sus alumnos con películas. Toda una revolución en la época. De aquí me vino a mí esta pasión de que el cine explique la vida... y las asignaturas
El premio a los mejores comentarios es su publicación en el blog que creé el pasado curso. Hoy tenemos la satisfacción de que algunos de esos trabajos ya son referencia en Google, alcanzando uno de ellos casi 2000 visitas de distintas partes del mundo.
"El espíritu de la colmena" (1973). Víctor Erice
Los ojos de Ana (Ana Torrent) extasiados ante la visión de la película "Frankenstein" (1931) de James Whale
Wilhelm Dilthey (1833-1911)
Además, el cine es un poderoso reflejo de la sociedad, y un espejo del tiempo. Su utilidad en las asignaturas de Sociología o Psicología está ya probada, pero este curso también lo he introducido moderadamente en Educación para la Ciudadanía, y Trabajo Monográfico de Investigación: Filosofía.
Aunque una de las mayores satisfacciones ha sido el entusiasmo de algunos alumnos de 1º y 2º de ESO en Atención Educativa, que, de manera voluntaria, han entrevistado a sus padres y otras personas mayores, para reconstruir sus recuerdos cinematográficos y televisivos de infancia. Es una gran alegría ver que en esas entrevistas padres e hijos tendían puentes de conocimiento y vivencias.
"Sunset Boulevard" (1950). Billy Wilder
Norma Desmond (Gloria Swanson) y Joe Gillis (William Holden) ven las viejas películas mudas de la primera
"Satyr-Filmwelt" Buchhandels
Marc-Aurel-Straße 5
1010 Wien
Agosto 2014
El autor de este artículo posa en la puerta de la mejor tienda de cine de Europa, en Viena.
"Annie Hall" (1977). Woody Allen
El protagonista, Alvy Singer (Woody Allen) en la cola de un cine esperando ver la película "Ansikte mot ansiktede" ("Face to face", en inglés) (1976) de Ingmar Bergman
Ellos rechazan el cine en blanco y negro, antiguo, y, no digamos, mudo, simplemente porque lo desconocen. Pero cuando se apaga la luz y encendemos el proyector para ver estos DVD que traigo de casa, empieza un nuevo mundo, una nueva vida: la de Victor, el “pequeño salvaje”; los personajes oníricos de “Un perro andaluz” de Buñuel, acosados por el deseo y ajenos a la racionalidad del yo; el comportamiento patológico de Marnie, en el thriller de Hitchcock; la agitación política de la transición española en “Siete días de enero” de Bardem; o el delirio narcisista de Norma Desmond en la sublime “Crepúsculo de los dioses” del maestro Billy Wilder.
"Sunset Boulevard" (1950). Billy Wilder
Norma Desmond (Gloria Swanson) en una de las escenas más icónicas de la historia del cine
"El crepúsculo de los dioses" es una de las películas que más fascinación ejercen sobre los alumnos. En este caso, en la clase de psicología de 1º de Bachillerato. Recuerdo el pasado curso el impacto que les produjo: no se movían del asiento.
"Vivre sa vie" (1962). Jean-Luc Godard
La protagonista, Nana (Anna Karina) entra en un cine y ve extasiada la película "La passion de Jeanne d'Arc" (1928) de Carl Theodor Dreyer
Casa del Cinema
Largo Marcello Mastroianni, 1
Villa Borghese. 00197 Roma
Esta foto fue tomada en Roma el 2 de enero de 2015. Marcello Mastroianni y yo
British Film Institute (BFI)
Belvedere Rd, South Bank, London SE1 8XT
January 5. 2018
Aquí estoy yo con un programa del BFI South Bank para febrero de 2018
IES "Doctor Balmis"
Cerámica, 24
03010 Alicante
Foto de Francisco Huertas Hernández
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Comentarios de nuestros lectores:
- Lola Huertas: "¡Enhorabuena por, además de pensar en ello, llevarlo a cabo con éxito! Durante este curso, en la asignatura "Valores Éticos", también he trabajado con pelis. Lo difícil es que se enganchen a las pelis en blanco y negro... En inglés, que es mi asignatura, es más fácil, y alguna vez he conseguido introducir alguna. Congratulations! Comparto con tu permiso"
2 comentarios:
La idea de educar estéticamente el gusto de gente muy joven proyectando en clase películas en blanco y negro es sencillamente genial, incluso si me apuras, un punto subversivo. Enhorabuena por todo el proyecto
No soy nada optimista sobre nuestra labor (mi labor). Nuestros alumnos oyen trap y ven vídeos estúpidos en youtube, se comunican por instagram, no leen libros, ignoran la historia y el arte. Ven con fastidio las películas en blanco y negro y concluyen "que no está mal para la época en la que se hizo..." perdonando la vida a Billy Wilder, y usando con todo el desconocimiento la Falacia Ad Novitatem (una idea es correcta o mejor simplemente por ser más moderna, más reciente o más nueva), o sea, que para ellos la técnica de la película es lo que hace que sea mejor. Confunden medios (técnica) y fines (valor artístico). Es como si llevado al plano de la pintura dijeran que hoy se pinta mejor que Velázquez porque se han desarrollado técnicas más modernas, o que El Quijote está bien para la época en la que se hizo. Este prejuicio irracional es dramático e ilustra quien decide lo bueno: la razón tecnológica, del dominio de los medios sobre los fines.
Claro que hay unos pocos que acabarán desarrollando un gusto estético, pero cada vez son menos. Cuando empecé a poner "Con faldas y a lo loco" solo se oían mis carcajadas, cada vez más apagadas en medio de su impavidez: no pillaban ningún gag, ese humor les era incomprensible. Al cabo del tiempo alguno valora aquellas películas, que lamentablemente pertenecen a un mundo desconocido para nuestros alumnos en la era de las comunicaciones.
Yo amo enseñar, pero pierdo la ilusión con su aburrimiento. Es cierto que a veces sacamos ideas de ellos, brillantes, pero han perdido el contacto con el mundo de la cultura, porque ellos ya tienen su "cultura" instantánea con sus referentes tan efímeros como las redes sociales, y que nosotros desconocemos. El alejamiento de su mundo y el nuestro crece día a día.
Cuando yo estudiaba en el instituto sentía una reverencia por los clásicos, aunque los desconociera. Sabía que yo tenía que hacer el esfuerzo para llegar a ellos, y no prejuzgarlos con condescendencia desde la ignorancia.
La enseñanza está muy mal. La pasión por aprender ha quedado vinculada solo a lo que rinde económicamente o tiene una vertiente lúdica y digital. El amor por el saber, la belleza, el bien, todo eso resulta ridículo hoy en día
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